problema resuelto

45 8 6
                                    

El escenario era frío, no sabían lo que el doctor les diría, aunque todos resaban por qué fuera algo bueno, no solo ahí las cosas estaban tensas, si no que afuera los reporteros esperaban cualquier cosa, no realmente por qué les importará la condición de el Sumiye, si no que solo querían algo con lo cual poner el grito en el cielo.

Un grupo de chicos se encontraban llegando al hospital, les sorprendió que los reporteros estuvieran tan inquietos, ellos creyeron que tal vez tendrían algo de consideración y mantendrían la calma, pero solo eran una bola de perros sarnosos esperando un buen trozo de carne ladrandole al carnicero.

No les costó pasar, pues los guarda espaldas que estaban deteniendo a la prensa ya los conocían, la prensa como siempre se lanzo sobre ellos para intentar sacarles información que obviamente no tenían, solo ignoraron a estos y se metieron al hospital no sin antes mirar mal a la prensa.

Tardaron un rato en encontrar el piso en el que seguramente estaban sus conocidos esperando respuesta de la salud de su amigo, una vez los identificaron pudieron darse cuenta de que estos acababan de resivir noticias del doctor, no alcanzaron a escuchar lo que este les dijo, así que se acercaron a preguntar.

-¿Está todo bien con?-no alcanzo a terminar de preguntar el Akabane ya que Suoh lo abrazo más que contento mientras lloraba de alegría

-s-si, está bien-contesto Suoh, Toko por su parte se hacerco contento a Kit por la noticia

-todo está bien, solo necesita descansar, afortunadamente la caída no daño mucho su cabeza-dijo Nika haciendo que Honey suspirara aliviada

-menos mal-opino Ranjiro con una sonrisa, miro a su hermano y pudo ver que este era abrazado por el Murasaki mientras esté lloraba de alegría

•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•

Un rubio se encontraba despertando, no había nadie en la blanca habitación, sentía un dolor de cabeza inmenso, pero al analizar mejor el lugar en el que se encontraba, se percató de que, pese a ser una habitación blanca, no era la suya, los recuerdos de lo último que vio se le vinieron a la cabeza, el viendo el final de las escaleras, pero luego sintió que le habían tomado de el brazo, haciendo que fuera hacia atrás, el grito de su madre, y luego, todo era...oscuro.

Los recuerdos solo hacían que su cabeza doliera más, pero la imagen de Suoh cruzó por su cabeza, era sierto, ¿Suoh se habrá enterado de lo que le pasó?, El solo hecho de pensar en que su amado estuviera destrozado por pensar en que el estaba mal le dolía, le dolía mucho más de lo que le dolía su cráneo por el golpe, aunque en sierto punto también le alegraba, ya que eso significa que era muy importante para el peli-blanco, sonrió un poco ante esto, pues en serio lo único que deseaba ahora era poder estar con su amado amigo...quisiera decir que novio, pero aún no tenían algo formalmente, tambien deseaba ver a su madre, quien pese a siempre haber apoyado a su padre en las decisiones de su vida, está siempre le mostró cariño y comprensión, cosa que su padre nunca hizo, quería ver a su primo Wakiya, podrá ser arrogante, pero sabe que es buena persona, conocer más a su ahora cuñado, pues el Murasaki era como su hermano mayor, tenía que asegurarse de que su novio fuera lo suficientemente bueno para el, aunque eso no lo dudaba, después de todo, Rantaro es hermano de su amigo Ranjiro, así que sabía que estaba en buenas manos, quería ver a sus demás amigos, sobre todo al cabeza hueca de Aiga, irritante aveces, pero gran amigo, Toko y Nika, Honey y Kitt, hace tiempo que no ve a los dos últimos, tenía muchas ganas de entrenar con su ídolo, Shu Kurenai, ¿Quien sabe?, Talvez se anime a pedirle a Shu que sea su maestro.

Te daré la oportunidad (Rantaro x Wakiya) [continuación]Where stories live. Discover now