Recuerdos De Amor - Brittana

Capitulo 6

Capítulo 6

Era la hora exacta cuando Brittany ya normalmente estaba dando vueltas por toda la casa, buscando o ordenando un poco los papeles que siempre llevaba a la escuela con la planeación de clases, pero en la casa solo se escuchaban estornudos saliendo de la habitación de la rubia.

-¿Mami? -Isabella decía desde afuera con su cabecita pegada a la puerta

-Niña Isa, mami está un poquito enferma. -Miriam la cargaba en brazos. -¿Quieres verla y después te alistas para ir a la escuela?

-No, yo quiero quedarme con mi mami. -la niña hacia un puchero mirando la cara de Miriam. -Por favorcito Miriam -la niña estaba al borde del llanto.

La puerta de la habitación se abrió revelando a Brittany con un pañuelo en su mano y su nariz completamente roja, sus ojos le ardían y estaban un poco achicados, Isabella la miró con sus ojitos llenos de lagrimas y a la rubia se le rompía el corazón al verla así.

-Mami -la niña seguía con sus pucheros colocando sus manos al frente para que la niña la alzara en sus brazos.

-Cielo, mami no puede -Brittany le dijo sintiéndose muy mal. -luego tu te puedes resfriar tambien, hazle caso a Miriam. ¿Hazlo por mamá, si?

-Pero no quiero irme sin ti -la niña lloraba -¿Iré solita a la escuela?

-Isabella, mami hoy no puede ir a trabajar, te llevaran e irán por ti. -la rubia le explicaba con un tono dulce. -vamos, hazle caso a Miriam.

Con mucho pesar y tristeza la niña había dejado que Miriam la alistara para irse a clases, y después de desayunar se había sentado en la sala de estar esperando la hora para irse, aun con dejes de sollozo por no poder abrazar a su madre aquella mañana.

Para desgracia de Sam y de la niña, él debía llevarla a clase, porque Rachel estaba fuera de la ciudad y Quinn tendria reunión informativa aquella mañana, la única salida fácil sería pedir aquel favor al rubio.

Los pasos bajando las escaleras de Sam resonaron por el silencio que había en la casa a esa hora temprano, Brittany lo había llamado muy temprano para que se presentara en casa y decirle que se encontraba un poco indispuesta y por eso tendría él que hacerle el favor de llevarla a la escuela.

Estaba enojado, tenía una junta aquella mañana y ahora seguramente se retrasaría... aunque aquello había sido solamente la primera excusa que había encontrado para librarse de esa desagradable tarea que era tratar con esa insoportable niña, como él la llamaba siempre que tenía oportunidad en sus pensamientos, aquello siendo todo el tiempo.

Bajó y entró a la cocina sin decirle hola a Miriam y la señora también se hizo la que no lo vio, tomó un poco de jugo rápidamente miró la hora en su reloj de muñeca, y salió a la sala para buscar a la niña, Isabella estaba aún llorando un poco porque no quería ir con él y también porque solo quería estar con su mami, estaba preocupada por ella y quería darle mimos como cada vez que ella se sentía enfermita Brittany hacía.

-Vamos, niña. -Sam tomó su bracito un poco brusco y la sacó de la sala caminando hacía el auto.

-Me lastimas -la niña se quejaba intentando zafarse.

-Mira niña no tengo todo el día así que necesito que me colabores para que tú llegues a tu estúpida escuela y yo pueda llegar temprano a mi reunión.

-Yo quiero a mi mami -lloraba.

-¡Yo quiero que te calles! -le gritó haciendo temblar de miedo a la pequeña -No quiero escucharte llorar. -salió a la calle con el auto e Isabella se arrodilló para ver por el vidrio de la parte trasera del auto.