★|Seven

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Una semana después, Taehyung y Jungkook se encontraban organizando una última reunión antes de partir a una de las fronteras, partirían en la madrugada del siguiente día.

Cuando sus padres habían ido la semana pasada nada extraño había pasado en las dos fronteras donde se habían presentado problemas anteriormente. Las cosas se mantuvieron tranquilas durante su estadía en dichos lugares. Sin embargo, mantuvieron la vigilancia activa. Y todo marchaba en orden.

Hasta dos días atrás.

Se presentaron altercados más grandes pero en la tercera frontera, pero esta vez algunos Betas salieron lastimados en los enfrentamientos que se presentaron.

Según tenían entendido, los atacantes eran una manada pequeña que no estaba dirigida por algún clan, o que pertenecieran a alguno. Más bien eran un tipo de especie de rebeldes en busca de acabar con la calma de manadas pequeñas, ubicadas en las pequeñas colinas de las fronteras, lo que podría pensarse que escogen estos lugares estratégicamente. Después de todo eran los lugares más vulnerables. Algunos decían que lo hacían por diversión, mientras que otros decían que lo hacían con mala intención. Pero fuera como fuera, no era bueno dejar que esto siguiera avanzando. Debían cortar esto de raíz. Sobre todo si ya algunos lobos de su clan habían resultado heridos.

Además de que estaban acabando con la paz y tranquilidad por la que lucharon tanto.

Pero esta vez no irían Jeon Jaehyun y Kim Minsu, sino que irían sus hijos. Debido a que habían salido algunos Betas heridos, no podían tomarse el asunto a la ligera. Por lo que el viaje de ellos duraría como mínimo una semana. Sería una visita sorpresa en dicha frontera, llamada Milyang, la cual era la más grande entre las 3 que los rodeaban.

El equipo escogido era con el que siempre entrenaban Taehyung y Jungkook. Además de un par de Betas más.

"Bien, entonces nos encontramos a las 4 de la mañana en la entrada del bosque Han" finalizó Taehyung.

"Quien no esté puntual en el punto de encuentro se quedará" recordó Jungkook.

Una vez que dieron finalizada la reunión cada uno fue saliendo del lugar. Se habían reunido en la casa de Jungkook.

El punto de encuentro sería en el bosque, ya que se irían en manadas. En su forma lobuna.

"Antes de irte acompáñame a la oficina un momento, Tae" Jaehyun no se encontraba en el momento, así que podían usar la oficina tranquilamente. Junkoook no esperó respuesta y salió en dirección al lugar mencionado. Sabía que Taehyung iba detrás de él.

Una vez dentro de la oficina y con la puerta cerrada con llave, Jungkook se permitió dejar un corto beso en los labios rojizos del Alfa castaño.

"Te extrañé como un loco" susurró Jungkook aún cerca de los labios de Taehyung.

"Yo también, mi amor"

Hace una semana atrás, cuando fue el celo de Jungkook, y cuando Sana se enteró de los supuestos amoríos de Jungkook. La chica solo le había dedicado una fingida sonrisa a Jungkook, para seguido irse a hablar con la madre del azabache. 

Sorprendentemente Sana no le hizo alguna escena de celos, tampoco le reclamó algo. No desmintió nada con respecto a que pasaban sus celos juntos según lo que pensaba Jaehyun. Sin embargo, Jungkook no es tonto. Así como Sana tampoco lo es, por lo que está convencido de que la chica se trae algo entre manos, pero no sabe que es. Y eso lo ha tenido de los nervios.

Una semana lejos le haría bien, según sus pensamientos.

Pero Jungkook seguía actuando de la misma forma con su omega destinada. Distante.

Red Thread ★ Taekook/KooktaeWhere stories live. Discover now