C5

966 67 57
                                    

Evan POV

La reservación que había hecho Amber en mi restaurante favorito era para las siete de la noche, eso me daba oportunidad de llegar al departamento y cambiarme de ropa, también para responder la gratificante y larga felicitación de Karen, fue un texto extenso y un poco emotivo pero quería responderle con más calma ya que no solo esperaba darle un simple "gracias", quería aprovechar para contarle algunas novedades.

Abrí la puerta de mi auto (alquilado, por cierto) porque todavía no había logrado juntar el dinero exacto para uno exclusivamente mío, lo tendría a mediados del año entrante, pues mi prioridad era el bebé, no me costaría seguir pagando el alquiler de este auto mientras que pudiera hacerlo.

Estaba a punto de meter la llave en el contacto cuando alguien dio unos golpes a mi ventana, me quedé congelado del susto, el estacionamiento subterráneo estaba un poco oscuro y vacío, muchos ya se estaban retirando y era de las pocas personas que quedaban, creí que era un vagabundo pero no, era Diana. Todavía me estaba recuperando del susto cuando bajé la ventana y ella se disculpó con una sonrisa afable cuando vio mi expresión.

—Discúlpame, debí haberte asustado, necesitaba alcanzarte antes de que te fueras —se mordió el labio con vergüenza. —Quería las carpetas que te presté ayer, ¿Recuerdas? Te di algunos datos para completar unos reportes y quería saber si podrías entregármelos, de verdad siento la molestia pero los necesito para terminar mi trabajo y mañana es sábado.

Me concentré para saber a qué se refería, medité unos segundos y después recordé una carpeta azul que dejé esta mañana en la mesa, se suponía que debía traer esa maldita carpeta conmigo, ¡Joder! Lo olvidé, ella me prestó esa carpeta para mis reportes y ahora yo debía regresársela para que completara su trabajo.

—Diablos yo... ¿Los necesitas, verdad? Sí, lo sé —respondí por ella sabiendo que no existía otra respuesta, era necesario que los entregara, ¿Cómo iba a hacerlo? Mi móvil vibró en el bolsillo de mi pantalón, aproveché la distracción para pensar en un plan, era Amber quien me avisó que había salido un momento con Mónica, que no tardaría mucho, solo iría a recoger un vestido que ella le había comprado.

Y de la nada supe que hacer. Solo sería un momento, no va a pasar nada, pensé, era algo normal, de trabajo, nada de lo que preocuparse. Instintivamente miré a Diana, quien esperaba ya con el rostro disgustado, trataba de no hacerlo pero sus cejas fruncidas y su boca hecha un gesto me lo confirmaban, estaba ya pensando en lo peor.

—Te seré sincero, están en mi casa, olvidé traerlos conmigo así que te debo una disculpa —otra disculpa, además de haber olvidado mi promesa de invitarla a comer ramen, bueno, al menos esa ya era pasado —¿Te importaría si esperas mientras voy por ellos?

Miré alrededor del estacionamiento, no era un lugar seguro para esperar a alguien por un buen rato, el trayecto de aquí a mi departamento eran de casi veinte minutos y su auto era igual de pequeño que el mío, no quería sentirme mal ni mucho menos culpable si algo llegara a pasarle por mi estupidez y falta de educación.

Cerré los ojos y resoplé.

—Dios, que maleducado soy —negué con la cabeza, abrí los ojos al tiempo que ella apenas y curvaba con fuerza una sonrisa, sin entender nada de lo que yo trataba de hacer —¿Te importaría si vamos a mi casa y te los entrego? Prometo traerte de vuelta y perdón por la molestia, debí haber traído esa carpeta, era mi responsabilidad.

En seguida se rió entre dientes con suavidad, el brillo blanco de sus dientes deslumbró ante mí cuando la contemplé de manera prolongada, sus ojos grandes parecieron aumentar de tamaño cuando se quedó mirándome también, me sentí un poco incómodo pero no aparté los ojos.

Mi Recuerdo Favorito©+18 [MCF#3]Where stories live. Discover now