La casa de muñecas (NaibxEli)

Capítulo 11: La entrada al cielo

El rostros de Eli ardia por los constantes golpes que le daban. La sangre escurrio por todo su rostro, empapando completamente, sin vista de lo que ocurría a su alrededor. Estaba ya perdiendo totalmente la razón, su cabeza no podía reaccionar ante él peligro. Lo único que escuchaba a lo lejos, eran los gritos de súplicas de parte de Mike, quien desesperadamente intentaba llegar a una tregua con el asesino. No podía hacer nada.
Intentó arrastrarse hacia la voz del joven, pero recibió una gran patada en el estómago.

-Dime la verdad, Mike-comenzó a decir, Norton. Tenía toda la ropa manchado por la sangre del ex oficial, su rostro melancólico le daba una percepción negativa a Mike.- ¿Tu me amas a mí o a ese policía de segunda?

El joven rubio no respondió sólo bajo la mirada,dandole una respuesta automática al homicida. Se decepcionó completamente de él, pensó que era distinta a las demás esposas que había traído a su hogar. Ahora tendría quitarle esos ojos juzgadores y llenos de mentiras, pero una gran parte dentro de él le impedía hacer aquel acto. Antes, cuando las mujeres eran malas con el, las mataba sin piedad, ahora tenía miedo de hacerle daño al joven rubio.

-Somos... Mejores amigos... Vi crecer a Mike como si fuera mi hermano- respondió con dificultad, Eli. Quien peleaba por resistir un gran dolor en su pecho que no le dejaba respirar.-Por eso, es que no dejaré que un imbecil se lo lleve lejos de mi. Ni siquiera con las peores torturas o amenazas. ¡No dejaré que Mike este con un monstruo como tu!

-¡Callate, Eli!- grito con toda sus fuerzas, el menor. Sus lágrimas caían como lluvia en invierno, era muy obvio lo que estaba haciendo, no quería que sufriera más su amigo por ende se sacrificaria por el.Entre sollozos continuó hablando- No digas eso, por favor. Estoy enamorado de Norton y crearemos una familia, mientras hacemos eso quiero que te olvides de mi. No te quiero ver mas.

Norton empezó a reír como un maniático, asustando al menor. Eli no reacciono, aún estaba sorprendido ante las palabras de su amigo, unas pequeñas lágrimas se asomaron entre sus párpados. Sabía muy bien que había dicho eso para protegerlo, pero aún así le dolía demasiado.

-El me ama a mí, no a ti-se burló, Norton.

Eli iba a insultarlo, pero una voz lo interrumpió. Gruesa y potente, era como si un ángel vengativo bajo del reino de Dios para castigar a los pecadores. El policía la escucho detenidamente, no creía en los seres mágicos ni tampoco en las almas, era obvio que ese ruido lo provocaba alguna persona. Logró concluir que ese ser mágico no era sin mas ni menos que el jefe Naib Subedar. Sus grandes botas resonaron por todo el hogar, provocando que el asesino se pusiera nervioso.

-¡¡Norton Campbell, policía de Lakeside Village!!- se presentó. Naib se adentro en la oscuridad de la casa, con el arma apuntando a cualquier movimiento a su alrededor. Cuando llegó a la entrada del pasillo, vio como una pequeña luz sobresalía de la puerta de una habitación. Lentamente se acercó a ella,sin bajar el arma.-Tenemos todo el lugar rodeado, ya no hay escapatoria. ¡Rindete, "asesino de muñecas"!

El asesino, furioso ante la situación agarro de entre medio de sus muñecas una cuerda y se coloco a un lado de la puerta, esperando la oportunidad. En sus ojos se notaba como la sed de sangre lo consumía por dentro,o mejor dicho un recuerdo perturbador lo consumía por dentro . En el pasado había hecho algo malvado, provocando un quiebre en su mente, algo más allá que la soledad y sus muñecas. Ese algo tenía que ver con sus verdaderos padres.

Con toda su fuerza, Eli intentó levantarse para detener los planes malignos de Norton. Al ver cómo su cuerpo no respondía, desesperadamente grito el nombre del policía, provocando que este abriera de una sola patada la puerta.

-¡Naib, cuidado!

El policía al escuchar la advertencia reacciono rápidamente,dándose la vuelta para dispararle al sujeto, pero no fue posible. El arma se disparo al suelo, gracias a la golpiza que había recibido. Norton no se iba a rendir tan rápido, lucharía por su amado hasta la muerte. Así que, como pudo, le dio tantos puños en el rostro del hombre, haciendo que este soltara la pistola para protegerse con ambos brazos.
La unica forma de defensa se deslizó hasta llegar a los pies de la cama, donde estaba Mike. El rubio la quedó observando por un buen rato, hasta que reacciono.
Las golpizas no cesaron, Naib se mantuvo de pie con el rostro lleno de sangre, se defendió como pudo. Pero ya estaba llegando a su punto de quiebre. Eli al ver cómo acorralaban a su jefe en un rincón, se levantó inmediatamente gracias a una fuerza que se adueñó de su cuerpo. Junto a un grito de guerra se tiro encima de Norton, dándole varios golpes detrás de su cabeza.
En un arrebato de cólera, el asesino de muñecas agarro a Naib y se lo tiro a Eli,ambos cayeron abrazados a un costado del mueble con las muñecas.