No-Empathy (2ʰᵒ)

CAPÍTULO 1

Tan solo había pasado una semana desde que se le había asignado su trabajo fijo en ese centro especializado, todo gracias a su padre que le proporcionó tal enchufe.

Debería agradecerle, pero no podía hacerlo, no quería ese trabajo.

ㅡ Jeong, le toca su comida, enseguida la recibirá ㅡ Dijo un hombre de avanzada edad que acababa de entrar a la habitación pero desapareció inmediatamente en cuanto dio la información.

Como cada día que estuvo ahí, pudo observar como una especie de ventanita dentro de la sala donde se encontraba el trastornado, se abría y ahí estaba su comida.

Yunho la tomó y puso la bandeja sobre la mesa, frente al vidrio y frente a la pequeña mesa donde se situaba el menor.

Era lo mismo de siempre, ni siquiera cambiaban el menú, pero había algo que le sorprendía aún más que eso. Al lado de la comida habían unas cuantas pastillas que era incapaz de contar desde ahí, pero lo que sabía es que eran muchas para cualquiera.

ㅡ Esas pastillas ¿Cuántas son? ¿Para qué? ㅡ Preguntó Jongho finalmente, después de casi una semana haciéndose esa pregunta mentalmente.

ㅡ Eres el que "se encarga" de mí ¿No lo sabes? ㅡ

ㅡ No, no me han informado... ㅡ

ㅡ Pues no sé que son ㅡ

ㅡ ¿Y te tomas algo que no sabes que es? ㅡ

ㅡ ¿Tengo más remedio? ㅡ

ㅡ Vamos, ¿Alguien como tú no las puede rechazar? ㅡ Vaciló Jongho.

Pero Jeong lo ignoró y sin mirarle fue tragándose todas las pastillas como de costumbre y después comenzó a comer.

La incomodidad se hacía presente, Jongho pensaba que sería incapaz de mantener una conversación con él, era difícil hablar con alguien que no quería hablar, y bueno, no es que él quisiera hacerlo tampoco, pero era su deber.

Cuando vio que ya había terminado de comer, encontró el momento de hablar.

ㅡ Cuéntame algo de tí ¿Qué te gusta hacer? ㅡ

ㅡ Me encanta estar aquí encerrado y no hacer nada, como cada día ㅡ Dijo sin signos de ironía, como si hablara en serio.

ㅡ Vamos Jeong, yo no quiero estar aquí pero tampoco puedo hacer nada más que saber de tí ㅡ Dijo Jongho sabiendo que no lo decía de verdad.

ㅡ Todos los días me dices lo mismo, si no quieres estar aquí, vete o ignórame ㅡ

ㅡ No puedo y esto ya lo hago por orgullo, ya que estoy aquí, quiero ayudarte ㅡ

ㅡ Mira, me duele la cabeza, así que iré a descansar un poco ㅡ

ㅡ Todos los días me dices lo mismo después de comer... ¿En serio te duele o lo haces para no hablar? ㅡ

Y otra vez no respondió, solo fue hacia el fondo de la sala a una cama realmente pequeña que parecía hasta incómoda y se recostó, de espaldas al cristal.

✨

La siguientes semanas fueron prácticamente idénticas, aunque podía sentirse un poco orgulloso de que Yunho le parecía más hablador, pero tampoco era como para lanzar cohetes, no daba información que sirviera para la investigación.

Y así había transcurrido un mes.

Choi estaba durmiendo tranquilamente en su cama, su único momento del día tranquilo que lo podía pasar sin tensión, ya que mientras estaba despierto, aunque estuviera en su casa después del trabajo, estaba en tensión todo el tiempo pensando en el trabajo, no descansaba mentalmente. Y parecía que los astros se habían alineado para no dejarle descansar ni en su único momento del día.