Siempre serás tu

CAPÍTULO 69.

Por problemas técnicos de la organización no se pudo pujar por los premios. Me ha fastidiado bastante haberlo preparado con tanta ilusión para nada ya que aunque el viaje se reserva cuando el ganador quiera y haya fechas disponibles para ello habría que esperar a la siguiente gala para poder sortearlo.

Las chicas que se encargaban de validar los premios y prepararlos se habían equivocado en todo lo posible e incluso en más si eso hubiera sido posible.

Me parecieron muy tiernos los actos de Aaron. Al verme un poco cabizbaja cuando se marchó el encargado después de darnos la noticia le dijo a Lola que si le disculpaba y me tendió la mano para  levantarme de la silla. Le seguí hasta la parte donde se encontraban los responsables de que todo saliera bien y Aaron se puso a echarles un buen sermón sobre lo importante que era el dinero de este evento para toda aquella gente que necesitaba la ayuda.

Volvimos a la mesa y aunque no se había arreglado nada estaba un poco más animada hasta que vi las miradas de tensión que había en la mesa.

Lola que por una vez ha tenido una buena idea en momentos en los que se necesita una buena idea había propuesto ir a tomar algo a un bar ya que la gala había sido un fracaso. No un fracaso en el sentido estricto pero habían salido muchas cosas mal a nivel personal. Primero Rodrigo me eclipsa y me deja tirada delante de la prensa, después todas las situaciones incómodas durante toda la cena y por último, la cancelación de la subasta.

- He hablado con Gabriela, Carmen y Víctor.- dijo ella intentando disipar la tensión.- Me han dicho que les dimos envidia y están en el Hawaii tomando algo. ¿Por qué no nos acercamos un rato?

Creo que fui la primera que asentí y después Aaron, faltaban por dar su opinión Rodrigo y Raúl. Aunque creo que Raúl pensó que no era bienvenido hasta que Rodrigo respondió por él. Creo que a nadie nos dio buenas sensaciones su respuesta. 

- Es una buenísima idea, ¿verdad Raúl?- y aprovechando que no me había sentado se estiro para darle una palmada en la espalda un poco más fuerte de lo necesario para mi gusto pero Raúl no demostró ninguna emoción ante ese gesto.

- Creo que lo mejor es que me vaya a mi casa...

- No no, los amigos de Sara también son nuestros amigos.- dijo Rodrigo levantándose de la silla.

Aaron le dijo algo en voz tan bajo que no pude escucharlo cuando salíamos por la puerta de la sala de fiestas de las instalaciones.

Esperamos en la puerta de Hawaii a Raúl que tenía que llegar en su coche ya que él no tenía ningún coche que le pudiera traer y tenía que conducir él.

- Este chico se ha perdido igual es mejor ir entrando, ¿no?- preguntó Rodrigo que no me había dirigido ni la a mirada ni la palabra por más que intente hablar con él en la limusina.

- Tanto insististe en que viniera y ahora no quieres esperarlo.- le recriminó Lola que no estaba orgullosa del comportamiento con el que estaba actuando Rodrigo.- Además no vivía por aquí cerca, seguro que ha aparcado el coche cerca de casa.

- Sí, a un par de calles más abajo creo.- dije yo intentando recordar que camino habíamos tomado el día que salimos de este bar para ir a su casa.- No recuerdo muy bien que camino tomamos.

- Genial, has ido a su casa.- dijo Rodrigo con su tono sarcástico.

- Genial, has visitado las casas de la mitad de las chicas que se encuentran es esta ciudad ahora mismo.- dije yo con su mismo tono de sarcasmo pero cara de pocos amigos.

- No es ese que viene por ahí.- dijo Aaron señalando el final de la calle.

Venía hablando con un chico de forma muy animad.