『Sᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ❀ Iɴᴄᴏɴᴛʀᴏʟᴀʙʟᴇs 』

Capítulo 15.

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Esᴛᴇ sᴇʀᴀ éʟ ғɪɴᴀʟ ᴅᴇ ʟᴀ ᴘʀɪᴍᴇʀᴀ ᴛᴇᴍᴘᴏʀᴀᴅᴀ, ᴇsᴘᴇʀᴏ ǫᴜᴇ ʟᴇs ɢᴜsᴛᴇ.

‘Tᴇ ʀᴇᴄᴜᴘᴇʀᴀʀé, ᴀᴜɴ ǫᴜᴇ ɴᴏ ᴍᴇ ǫᴜɪᴇʀᴀs ᴅᴇᴠᴜᴇʟᴛᴀ’.

Aᴅʏsᴏᴏɴ Lᴀɴᴄᴀsᴛᴇʀ's.

Ya era él día, hoy sería mi primer día de clases en Stanford. Estaba muy emocionada no veía la hora de haber llegado.

Él campus quedaba algo lejos de las residencias, estaban en el mismo sector pero la hora de entrada era muy estricta, así que era mejor salir una hora antes.

Cepille mis dientes y me di una ducha rápida, me vestí y baje a desayunar, me despedí de algunos compañeros y salí rápidamente hacia la facultad. Me sentí algo culpable por no haber despertado a Sofía además, no sabía cuál era su horario para que asistiera a sus clases, tendría que preguntárselo luego.

Hoy sería un día muy ajetreado, ya qué tengo clases seguidas y son 10 materias por día, seria agotador.

«Pero valdría la pena..»

Logre llegar a tiempo al salón de clases dónde vería Biología —mi materia favorita— Noté que el profesor aún no había llegado al ver que habían estudiantes hablando entre ellos, ya nos hubieran dado una reprendida por hablar en horario de clase.

Como Stanford era muy grande, las facultades y residencias estaban muy retiradas del campus, conviertiendose asi en una carrera contra reloj para poder llegar a tú clase.

«Sí es qué podías..»

Todos se encontraban muy contentos, algunos estudiantes tomaban apuntes de cada una de sus materias, otros hacían grupos de estudio algo qué me llamaba mucho la atención, otros charlaban y discutían sobre como seria la vida universitaria dentro de unos años, donde pocos logren llevar bien sus estudios y poder graduarse con honores, mientras otros púes... estaban simplemente perdidos, no teniendo ni la simple idea de qué es un lápiz, teniendo en cuenta que están en unas de la mejores universidades del país, algo simplemente patético de entender.

La clase de biología estuvo de maravilla, aprendí cosas realmente interesantes, se podría decir que las moscas tienen el gusto en los «talones» pues poseen 15.000 papilas gustativas repartidas entre sus patas. Algo extraño y poco entendible pero así es la biología, amaría seguir escuchando al profesor hablar de datos sumamente «biológicos» e importantes que no conocemos, pero ya era hora de dirigirme a otra clase.

Ya se estaba haciendo de noche, todos los estudiantes del campus volvían a las residencias totalmente exhaustos del primer día de clases, algunos pensaban celebrarlo, pero al parecer sus planes fiesteros fueron cancelados por la universidad, qué muy bien tenían planeado hacer qué los estudiantes regresaran realmente cansados a las residencias sin ninguna pizca de hacer alguna celebración al respecto. Vaya, pero qué plan tenían bajo la manga.

Aunque debo admitir qué sí, el día estuvo sumamente estresante. No sabia qué las materias llegarían hacer tan fuertes. Espero qué Sofia allá tenido un día menos estresante qué él mio, pero estando en la misma universidad, era poco probable de qué tal vez la allá pasado mejor.