Pirates and Dragon

Pájaro enojado

      Dos días transcurrieron desde el incidente con el dragón y algunas cosas pasaron.

Wooyoung como castigo tuvo que limpiar todo el barco, lo que fue un alivio porque enserio estaba muy, pero muy, sucio.

Jongho y San se enojaron un poco conmigo, el primero por ni siquiera pensar en utilizar al dragón a nuestro beneficio y el otro por gritarle a su novio. Aunque ambos después me dieron la razón y ya es agua pasada el asunto.

Hablando del rubio, este bajó de su puesto para llegar a mi lado contento — Estamos por tocar tierra, capitán.

— Bien – le contesté – ¡Bajen el ancla y preparen los botes! — les ordené a la tripulación.

Todos estábamos bastante felices de volver a la isla Mist, ya que si bien amabamos navegar, esto significaba que estábamos cada vez más cerca de cumplir nuestro plan.

Sin embargo nuestra felicidad se convirtió en nervios al ver huellas ajenas en la arena, cuando se supone que ese terreno está vacío.

Les hice una seña para que todos guardarán silencio y saquen sus armas.

Seguimos el camino de las pisadas extrañas hasta llegar a un muchacho de cabello azabache que estaba inconsciente con el ceño fruncido arriba de donde se encontraba enterrado nuestro tesoro.

— Wow, ese chico se parece a un pájaro enojado – mencionó, para nada silenciosamente, el rubio. A lo que todos lo miramos molestos.

Aunque no importó porque el alto pelinegro ya se había despertado.