Pirates and Dragon

¿Un capitán enamorado?

Cuando salí, Seonghwa me estaba esperando en el pasillo para hablar.

-¿Sucede algo? - pregunté cómo si no me importara, aunque por dentro estaba entrando en pánico.

Seonghwa era tan dulce como un rollo de canela, pero cuando se enoja da miedo. Aún recuerdo la cara que hizo cuando puse un centímetro de mi pie en el piso que acababa de limpiar, tuve pesadillas.

-¿Le ibas a decir?

-¿Qué y a quién?

-¿Le ibas a contar mi secreto al príncipe?

-¿Qué? Claro que no - dije con un tono demasiado agudo por la sorpresa. Me aclaré la garganta y continúe: - Jamás haría tal cosa, puedes confiar en mí - dije y tomé su mano. - Solo quería sacarle información al príncipe y saber por qué la realeza atrapa dragones. En nuestra cultura, ellos son apreciados y venerados, hasta el rey y los príncipes lo usan como símbolo. No tiene sentido que los cazen.

Seonghwa me analizó con esos ojos hermosos y aterradores, mientras que le daba caricias a su mano con mi pulgar.

Fue un instante donde solo escuchaban nuestras respiraciones y a los chicos seguir devorando la comida.

-Confio en ti - finalmente habló y le dió un apretón a mi mano para después soltarla. - Sé que puedo contar con ustedes hasta que termine nuestro trato.

-¿Trato?

-Sí, ya sabes... solo estoy aquí por esta misión y luego prometiste dejarme libre.

-Ah, cierto, eso.

Me había olvidado por completo de ese pequeño y gran detalle.

¿Cómo es que puedo hacer todo un plan para infiltrarse en un castillo y formar una alianza con un miembro de la familia real para rescatar a un príncipe pirata y a una híbrida de dragón y olvidar estas cosas?

Estúpido cerebro enamorado.

Espera...¿Enamorado? ¿CÓMO QUÉ ENAMORADO?

Seonghwa es objetivamente lindo, buena persona, cuida a los chicos, es increíble peleando, hace una comida deliciosa y tiene el toque especial de convertirse en una bestia escupe plasma, así que es normal que me guste. En especial, si pasamos todo el día arriba de un barco viendo nuestras caras y el inmenso mar.

Pero hay una diferencia demasiado grande entre que me guste y estar enamorado de él...

-¡HONGJOONG-AH!

-Ay, ¿Por qué me gritas?¿Qué te hice?

-Te me quedaste mirando y no respondías, ¿Te encuentras bien?

-¿Yo? De maravilla -. Mentira. Estaba entrando en pánico.

-Capitán Hongjoong - me llamó alguien tras mis espaldas y volteé a verlo. Era un guardia real. - El príncipe me pidió escoltarlos hasta el sastre real - dijo e hizo una venia.

Los chicos venían atrás de él.

-Oh, claro... por favor, guíanos.

Observé de soslayo a Seonghwa para saber si lo había hecho bien. No tengo idea de cómo comportarme con gente con modales.

Sin embargo, él estaba negando con la cabeza como si ya no tuviera remedio.