Mi papá, el Dios de la destrucción 《Goku y Beerus》

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Goku ya se sentía más cómodo al estar entre los dioses. Ya no tenía tanto miedo como al principio. Además se había ganado una amiga entre ellos.

Pero los demás dioses aún lo veían como si fuera solo un simple mortal sin ningún tipo de especialidad o algo que llame la atención.

Y... tampoco se acostumbraban a que le dijera "papá" al dios destructor del séptimo universo.

Goku: Esto es muy aburrido...

Beerus: Shh... ya sé que lo es pero es nuestra obligación-le susurra regañando al chiquillo y su impertinente comentario.

Goku: ¿Cuándo nos iremos a casa?

Beerus: Cuando sea hora...

Goku: ¿Y eso cuándo será?

Beerus: Goku...

Goku: Pero...

Beerus: Pero nada.

Zen-oh-sama: que divertido.

Estaba jugando con un esquema real de los planetas. Algunos chocaban entre sí, haciendo que explotaran.

Heles: es el quinto planeta de mi universo que destruye...-susurra.

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Goku: ¡Al fin!-corre hacia la salida en cuanto Daishinkan se iba junto al rey del todo.

Beerus: ¡Oye, no te vayas! ¡Goku!

El pequeño saiyajin no lo escuchó. Pero luego se oyó su voz en un grito, el cual se hacia cada vez menos sonoro.

Whis: yo voy...

Sabía que había caído de la plataforma del palacio directo al vacío.

Unos pocos segundos apareció de nuevo con el pequeño Goku aferrado a su brazo, temblando.

Vermouth: ¿Que no le has enseñado a volar?

Beerus: los mortales no pueden hacer eso en territorio de dioses, cabeza hueca-Se acerca a su ángel y a Goku-Ahora sí podemos irnos, niño revoltoso-le revuelve el cabello.

Goku: genial...

Beerus: ya, ni que hubieras visto un fantasma.

Goku: Papá, casi me muero...

Beerus: Pero no pasó. Vamonos.

Shin: lamento la demora...

Heles: espera-luego de una batalla en su cabeza se dignó a hablar y acercarse a los del séptimo universo-Goku, quiero que conserves esto-se quita uno de sus brazaletes y se lo entrega al saiyajin-Quizás no te vea en mucho tiempo, pero hasta eso creo que este brazalete ya no te quedará tan grande.

Goku: muchas gracias, diosa Heles. Nos veremos cuando me convierta en dios destructor también.

Heles: seguramente.

Los dioses y el pequeño desaparecieron del palacio de Zen-oh-sama. La diosa sonreía sin notar las miradas de los demás.

Champa: te gustó el chamaco, ¿Verdad?

Heles: cierra la boca, panzón.

Vermouth: no creo que haya sido el chiquillo... y solo lo usa para llegar al raquítico de tu hermano.

Champa: ¡¿Qué?! ¡JAJAJAJA!

Heles: ¡Vermouth, si no sabes lo que hablas mejor cállate!

Liquir: ay, por favor, se te nota a leguas, Heles. Vámonos ya.

Su ángel y su kaioshin se acercan para irse.

Heles: ¡Uigh, son unos tontos!

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Beerus: creo que le gustaste a Heles.

Goku: ¿Gustar? Hmm, ella dijo que tú le gustabas. ¿Eso qué significa realmente?

Beerus:-se sonroja, interpretando las palabras del pequeño de una manera errónea a la que tenía Goku.

Goku: pero bueno, tú también me gustas.

Beerus: espera... ah... ya entendí a que te refieres con eso. Bueno, mejor ve a dormir.

Le sacude el cabello al pequeño y se dirige hacia la salida de la habitación.

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Ya sé que desaparecí de esta historia de una forma increíble...

Quise actualizar porque vi que a pesar de no hacerlo seguido, recibe bastante apoyo, cosa que agradezco y mucho.

No sé si seguiré actualizando, pero trataré de hacerlo.

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