High Hopes H.S.

F I F T H Y E I G H T

Él nunca deja de verme en ningún instante, desde que llegamos a su casa y estuvimos adentro, espera una explicación, pero no puedo darla, quizás si la escucha salir de mis labios iba a sonar estúpido e ilógico, a pesar de que para mí sonará con sentido.

—No entiendo —alzo la mirada para volverme a encontrar con su ceño levemente fruncido, y sus cejas haciendo una curvatura que da a demostrar que se encuentra enojado—, ¿Por qué te contradices tanto? —pregunta pero se que no espera una respuesta, porque sigue hablando—. Primero dices que no quieres venir porque te encuentras emocionalmente inestable, y que esperas que haya un estallido entre nosotros, pero ni siquiera has esperado llegar acá para hacer que ambos nos sentamos incómodos. —vuelvo a bajar la mirada y puedo sentir su exasperación apenas lo hago.

No quiero verlo porque ya la vergüenza comenzaba a entrar en mi sistema, sin embargo no quiero dar mi brazo a torcer.

—Allyson —usa el mismo tono de voz que en la casa de Emi—, no pienso seguir hablandote si no me prestas atención. —vuelvo a verlo y muerdo mi mejilla interna.

—Que no te esté viendo no significa que no esté escuchando todo lo que dices. —digo de una forma que me suena retadora.

—Entonces ¿Por qué dijistes eso cuando estábamos en auto? —pregunta y me quedo callada—. Fue totalmente desagradable —alza sus hombros y vuelvo a ver esas arrugas en su frente, y por alguna razón también siento temor—, pensé que de alguna forma ya llegabas a entenderme, y porque pasa todo a mi alrededor, y a ti solo parece moles...

—No es así —lo interrumpo—, lo que dijiste sobre Jeff fue como un golpe en el estómago —dejo de verlo por la vergüenza de hablar, y juego con la costura de mi blusa—, pensé que realmente trataba de defenderme, suena estúpido, porque realmente no le debo nada, pero después de lo que ha sucedido con John sentir el acercamiento amistoso de alguien me llena —suelto el aire contenido y no entiendo porque quiero llorar—, yo sé que puedo confiarte todo a tí, no tengo problema con eso, pero la relación con John me mal acostumbro —me permito llorar por la perdida de mi mejor amigo, porque en la forma en como había terminado todo había sido dura, y yo la enfrente de mala manera—, la acción de Jeff no estuvo mal, es más, nadie tiene la culpa realmente, solo yo por impulsiva. —limpio mis mejillas y trago saliva para pasar el mal sabor de todo esto.

Después de lo que pasó con mi padre, conjunto con lo de Alan, pensar en John era lo último que hice, quizás se encontraba inconscientemente ahí porque estoy atormentada y abrumada.

Creo que este ya era mi último estallido, o eso espero, porque ya no aguanto que me vean con lastima, o reaccionar incorrectamente a cosas que ni al caso.

—Mañana iré con la psicóloga, no necesitas escuchar más de esto. —me paro de mi puesto y voy al baño sin pedir permiso o esperar a que hable, o a qué siquiera salga del trance de entendimiento.

Ni siquiera se que vengo a hacer aquí, no tengo ganas de ir al baño, o tengo que lavarme las manos, sin embargo trato de perder mi tiempo, desahogarme o sentirme bien, pensando completamente sola, lavo mis manos, acomodo mi cabello y ropa, lavo mi cara, y hasta me permito volver a llorar por mi amigo, quizás ya no era perder el tiempo, sino quizás un entendimiento personal.

Finalmente salgo del baño y busco con la mirada al chico de ojos claros, me doy cuenta que ha sacado mi celular de su bolsillo y lo ha dejado descansando en la mesa frente al sofá juntó las llaves de su auto.

Dándome cuenta que no se encuentra en la estancia de la cocina, el comedor y mucho menos de la sala, me voy a el pasillo hasta las otras estancias y entro a lo que él le llama estudio.

Lo encuentro sentado, no lleva zapatos ni medias y le ha dado tiempo de cambiarse por un tipo de bermudas cortas con una camiseta. Apenas el se da cuenta que he entrado deja su libreta a un lado y alza la mirada.