HISTORY | high school musical

xii. New Troy.

CAPÍTULO XII: NEW TROY

Después del increíblemente incómodo momento en la piscina con Troy y con Fulton, Megha había llegado a casa algo molesta. De nuevo, las consecuencias habían sido solo para ella, pero a Troy no le habían dicho nada al respecto. Era más que obvio que había cierta preferencia por parte de Fulton hacia Troy, Megha lo sabía, pero no podía ignorar que estaba mal.

Ofrecerle una beca, era un gesto bastante amable de parte de los padres de Sharpay, pero siendo ella era casi la propietaria de Lava Springs y Troy un empleado allí, esas "ayudas" que Sharpay le brindaba y todas esas atenciones especiales que él no podía rechazar por miedo a perder su empleo o, aún peor, la oportunidad de estudiar, era algo mucho más profundo y maduro.

Megha no era una chica celosa, sabía que no tenía que temer por la lealtad de Troy hacia ella, pero estaba al tanto de que Sharpay estaba muy interesado en él (seguía sin comprender por qué tanto) y que estaba dispuesta a hacer todo lo que estaba haciendo para llamar su atención y tener su gratitud.

Decide dejar sus pensamientos sobre el trabajo y todo el drama de Troy y la rubia en Lava Springs, mientras coloca las llaves de su casa en la cerradura y entra, suspirando algo aliviada de que ya está en casa. Su madre está sentada en el sofá mientras come algunos fideos de su restaurante chino favorito, se voltea cuando escucha la puerta y le sonríe, con sus mejillas algo llenas por la comida.

—Hola cariño, ¿Cómo estuvo tu día? —le pregunta, tragando y sonriendo con amor. —Tu cena está en la encimera, aún está caliente.

Megha le sonríe, tomando sus fideos, y se sienta junto a ella, sacándose los zapatos con los pies. —Estuvo bien. Nadie se ahogó en mi guardia, ningún niño fingió ahogarse y ninguna madre se quejó de algo que no tenía nada que ver conmigo.

Anya ríe. —Eso es bueno. —Megha asiente mientras lleva los palitos con comida a su boca. —Por cierto...tu padre me llamó hoy.

La morena frunce el ceño, extrañada. —¿Por qué?

Su madre suspira, cansada con el asunto del divorcio y lo difícil que podía llegar a ser su muy pronto ex marido. —Dijo que quería luchar por tu custodia.