🌙 18

6.1K 770 744
                                    

Pasé de odiarte a ti, a odiar a mi corazón

Hinata no podía hacer nada en contra de lo que sentía, tenía que aceptar su destino

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Hinata no podía hacer nada en contra de lo que sentía, tenía que aceptar su destino. Se tuvo que enamorar de la persona menos inesperada. De la persona que pensaba que jamás sentiría algo. Si se negaba a sus sentimientos, sabía que sería peor.

Aunque, muy en el fondo, no le sorprendía que terminara enamorado de Kageyama.

Lo juzgó mal cuando a penas lo estaba conociendo, pero cuando empezó a hacerlo mejor, se dio cuenta que era una persona agradable, sólo algo difícil de llevar en ciertas ocasiones. A pesar de eso, su corazón se negaba a rechazarlo.

Al estar pensando en que momento sintió algo más allá que amistad por Kageyama, se dio cuenta que fue cuando lo vio jugar voleibol con sus amigos. El verlo concentrado, su expresión seria, sus ojos fijos en el balón y tratando de regular su respiración, no le pareció difícil el pensar en él en otra manera.

No lo malinterpreten, Kageyama era guapo físicamente, pero no sólo vio eso. Se dio cuenta de la clase de persona que era, quizás no lo había visto convivir con otras personas aparte de su propio círculo social, pero de lo poco que había visto, notaba que era atento con los demás.

Era bueno escuchando, incluso si sentía la necesidad, te daba un consejo. Era amable, y cuando pensaba que hizo algo que te molestó, te preguntaba que fue para poder remediarlo. En sí, se notaba que quería lo mejor para los demás, incluso si tenía que esforzarse el doble para conseguirlo.

Era alguien que valía la pena en cualquier sentido. No le importaba si era su vecino gritón y que lo llegaba a molestar, ahora se daba cuenta que eso pasó a segundo plano, y lo que ahora le importaba era su persona.

Ya seguro y sin tener ninguna pregunta existencial, se decidió a aceptar su enamoramiento. Lo cual era lo mejor porque hace dos días no podía ni siquiera respirar correctamente.

Miwa había llegado en el tiempo correcto, justo minutos después que se dio cuenta que le gustaba el pelinegro. La chica entró saludándolos, notó que Shoyo tenía la cara sonrojada como si le haya dado un golpe de calor, así que se ofreció a llevarlo a su casa. Shoyo le agradeció varias veces, se levantó rápido de la silla, se puso a lado de Miwa y se despidió de Kageyama de lejos.

Miwa lo veía un poco confundida, pero aún así lo llevó. El camino fue silencioso, y Miwa empezaba a sospechar que había pasado algo. Cuando llegaron a la casa, Shoyo estaba apunto de bajarse, pero Miwa lo detuvo preguntándole si todo estaba bien. Shoyo se puso nervioso, su rostro volvió a estar sonrojado y asintió con la cabeza. Le agradeció que lo haya llevado y se fue.

Mi molesto vecino | KageHina [EDITANDO]Where stories live. Discover now