The trip

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MADDISON

Quedaban 2 días para irnos, y ya tenía prácticamente las maletas hechas, había metido tops de todos los colores, shorts, zapatillas, y sobre todo bikinis y bañadores. 

Hoy me iba a dedicar a visitar a mis abuelos, primos, y familia para despedirme. Aunque sólo fueran 2 semanas y media, nos veíamos muy a menudo y les iba a echar de menos.

- Cuídate mucho corazón - Dijo mi abuela con los ojos llorosos.

- No llores abu! Estaré bien, sólo serán dos semanas. - Dije intentando tranquilizarla.

- Eso es una barbaridad! Anda dame un abrazo. - Dijo estirando las manos. La quiero demasiado. Es como una segunda madre, igual que la madre de Ash.

Pasó el día en un periquete, creo que se me pasó tan rápido por los nervios, tenía tantas ganas de que llegara el día.

A la siguiente noche, no conseguía pegar ojo. No paraba de pensar en lo bien que lo iba a pasar. Nunca había ido a un campamento que fuera de dormir y literal estaba tan ilusionada como cagada jajaja. No sabía lo que me esperaba, pero sentía que iba a ser increíble.

Sonó la alarma a las 6:30AM, ya estaba despierta, por lo que no me costó levantarme. Había dejado todo preparado la noche anterior, para que con las prisas no se me olvidara nada. Desayuné ligero, un revuelto con pimienta, y un café con hielo, con este calor ya nada se podía tomar caliente. Al rato se despertó mi padre, él nos iba a llevar al aeropuerto.

Llamé a Ashley nada más salir del garaje de casa para avisarla de que ya íbamos a por ella.

Tardaba 5 min en llegar a su casa andando e íbamos en coche así que en unos segundos ya llegamos. Estaba esperando en la puerta con 2 maletas enormes.

- Pero tía ni que nos fuéramos 1 mes JAJAJA - Dije riéndome.

- Yo voy siempre con precaución, imagínate que hay una pandemia y nos tenemos que quedar a vivir allí hasta que pase porque nos confinan.

Mi padre soltó una carcajada frente a lo que acababa de decir Ashley.

- Ya te gustaría, anda sube.

Mi padre la ayudó a meter las maletas y no dirigimos al aeropuerto, eran las 7:30, y nuestro vuelo salía a las 9:15, llegábamos bien de tiempo pero por si surgía cualquier cosa llegamos un poco antes de la hora.

Nada más llegar, le di un fuerte abrazo a mi padre, y me soltó la típica charla de padre de que no hiciera ninguna tontería y de que tuviera mucho cuidado... Lo típico vamos.

Al entrar al aeropuerto, observé lo grande que era. Hacía años que no viajaba en avión y tenía demasiadas ganas. Me temblaba el cuerpo de lo emocionada que estaba. 

Estuvimos esperando hasta que tuvimos que embarcar, y cuando ya nos encontrábamos dentro del avión, Ash y yo flipábamos lo guay que era. En verdad era poco tiempo, 4h y media, pero tenía pantallas y un montón de asientos. 

Nos sentamos juntas y al lado de Ashley se sentó una chica que parecía algo mayor que nosotras, menos mal que no tocó al típico niño pesado que no para de llorar porque habría sido un infierno.

A los 15 minutos el piloto habló por el micrófono.

- Buenos días pasajeros, bienvenidos a el vuelo 1492. Salida Los Ángeles, destino Cancún. Son las 9:30AM, aterrizaremos al rededor de las 14:00, las 16:00 en Cancún. Esperemos que disfruten del vuelo y que estén lo más cómodos posibles. En unos instantes nuestras azafatas os enseñarán las medidas de seguridad que hay que tomar en caso de cualquier accidente. Les roguemos que estén atentos. Un saludo, el piloto.

El verano que nunca esperéWhere stories live. Discover now