16.- Palabras que duelen

1.9K 247 16
                                    

Han JiSung, Sungie, Hannie, Han. Realmente no importaba como lo llamará aquella mujer dentro de la oficina del director, él ya estaba arto de oírla repetir la misma mierda una y otra y otra y otra vez mientras le gritaba. Entendía que esta vez se había excedido al responderle al maestro de Historia, pero en su defensa, el muy hijo de puta había hablado mal de sus papás como si los conociera, como si él supiera todas las cosas que aquello jóvenes padres pasaron antes de su nacimiento.

JiSung nunca había golpeado a aún maestro en su vida, siempre prefería hacerlos desesperar con sus respuesta verdaderamente estúpidas y desquiciantes, pero ahora si que se lo pidieron a gritos. Las cosas que el profesor dijo de sus padres lograron prender aquella llama apagada sobre cómo había sido abandonado con sus abuelos, y no importandoles su pequeño niño. Él sabía que su vida era un mierda, pero a los demás no les debía interesar ni siquiera un poco.

Porque él no necesitaba la lástima de nadie, ni las miradas de pena. Él quería cerrarle la boca a todos esos idiotas que siempre le decía que era un bueno para nada. JiSung se había dicho muchas veces que sus calificaciones eran el reflejo de su inteligencia, habilidad y astucia que poseía. Nunca estuvo por debajo de nadie. Sin importar que tantas mierdas le dijeran, él siempre estaba por encima de todos, ocupando el primero lugar en calificaciones con un cien cerrado. Año tras año era el mejor de su salón y campus, nadie podía ganarle en lo absoluto. Él era el rey de la escuela. Los demás eran mierda.

-Estás suspendido, JiSung. - dijo la mujer cerrando la carpeta. - no te expulsaremos porque tus calificaciones son excelentes y los concursos de matemáticas e Inglés son los que más apoyan a nuestros campus, pero no te quiero aquí por toda una semana. Lo que hiciste sobrepasa todo lo que has hecho. No puedo aceptarlo.

-¿Pero su puede aceptar que hablen mierda de mi familia solo porque tengo más conocimiento de la estúpida materia de Historia? No me joda con eso.

-JiSung. - hablo la mujer quitándose los lentes. - él ya tenía varias quejas acumuladas aquí, con que vinieras a quejarte hubiese sido suficiente para despedirlo, ¿por qué tenías que golpearlo?

-¿Me está diciendo, que debí dejar que dijera que mi mamá es una zorra y que mi papá es un inútil drogadicto? ¡¿Tiene una maldita idea de todo lo que mis padres tienen que enfrentar por culpa de personas hijas de puta como ese imbécil?!

-¡JiSung!

El menor se tallo las mejillas alejando las lágrimas. La impotencia, el enojo y la rabia subían lentamente por todo su cuerpo, acabando con la poca paciencia que le quedaba en esa maldita escuela. Todos los días, semana tras semana era lo mismo. Soportar a los profesores, a sus compañeros y hasta los directivos que hablaban mal de toda su familia, sin importar que sus amados abuelos pudieran desaparecer la escuela con un tronar de sus dedos. Realmente lo jodia toda la sociedad y si seguía ahí era únicamente por su abuela y abuelo. Ambos ángeles en su vida era el único motivo por el cual no se había quetado la vida hace años.

-JiSung, entiendo totalmente lo que sientes. - dijo la mujer tomando las manos del menor entre las suyas. - ella es mi hermana y el mi mejor amigo. Yo también escuchó como se expresan de nuestra familia como si nosotros no existieramos, pero no por ello debes ceder, ¿me entiendes?

JiSung asintió, porque la entendía realmente, pero a diferencia de ella, JiSung no tenía paciencia, mucho menos con ese tipo de personas.

-Vete a casa con los abuelos, ¿sí?, haré todo lo posible porque no te suspendan, lo prometo.

-Está bien. - respondió y salió de la oficina de su tía con las mejillas húmedas y los ojos rojos.

Avanzo unos cuantos pasos antes de encontrarse con la última persona que quería ver ese día; Lee MinHo. JiSung rodo los ojos fastidiado. MinHo siempre aparecía cuando no lo necesitaba. Aunque si, estaba más que enamorado de él, no quería que MinHo lo viera llorando o débil, él quería que el mayor siempre lo viera hacer desastre, que lo conociera por ser inteligente y a la vez por ser un desastre de persona. Que lo conociera por responder y defenderse, por escapar de los castigos apenas se descuidaban. Él quería que MinHo solo viera la mierda que se había hecho con los años como imagen y no la verdadera esencia de Han JiSung.

-¿Estas bien? - preguntó el mayor acercándose a JiSung con toda la intención de tocar su cara, pero fallando cuando el menor se alejo. - ¿por qué lloras?

-¿Quién está llorando? - preguntó tallando sus mejillas y luego sus ojos. - estaba dormido y acabó de despertar. - respondió.

-¿Con la subdirectora?

JiSung volteo a ver la placa en la puerta y se mordió el labio inferior con nervios. MinHo solo pudo sonreír.

-En realidad estaba...

-Llorando. - interrumpió MinHo. - tus ojos no se ven así cuando recién despiertas de una siesta. Cuando lloras se ven triste, cuando te despiertas se hinchan, junto a tu carita.

-¿Qué? - preguntó mirando al mayor porque ¡¿cómo mierda sabía eso él?! - Fue Felix, ¿verdad?, voy a matarlo.

MinHo negó sonriendo y luego, de alguna forma extraña y desconocida, lo sujetó de las mejillas con fuerza para luego mirarlo fijamente. La cara de JiSung se tornó roja completamente y los nervios le sacudieron. Lee MinHo era su crush, el amor de su vida y la persona con la que tenía una vida imaginada de todo a todo, desde su casa hasta sus mascotas, y que lo tocará como si nada era simplemente mortal.

-Eres muy lindo intentando ocultar tu verdadera personalidad de mí, pero créeme, no puedes y confío totalmente en que al final serás todo lo que necesito para verte feliz.

-Ya lo eres. - dijo y apenas se dio cuenta golpeo las manos del mayor para alejarse haciendo que MinHo se riera. - ¡¿qué te crees tú, para tocarme?! ¡¿Acaso quieres que te pegué?! No vuelvas a tocarme.

Y salió corriendo del edificio, dejando a un Lee MinHo totalmente encantado y feliz.

Crazy Love #1 [CORRIGIENDO] Where stories live. Discover now