DIES IRAE | en donde dos super soldados somnolientos y dos viajes al baño inoportunos logran destruir todo Alaska.
original de shangchis.
traducida por dyxlan.
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Esa mañana, Daiyu nota que algo en el aire del hotel ha cambiado.
Después de los fiascos con los dolores de cabeza de Daiyu y las palabras desencadenantes de Bucky, Daiyu se asegura de beber un galón entero de agua cada día, y Bucky nunca se aleja demasiado de Daiyu. Y Daiyu pensó que eso lo arreglaría todo, pero aparentemente es una ley del universo que si un problema desaparece, otro tiene que aparecer. Hay un murmullo de conversación entre los miembros del personal que se aleja de lo normal, ya que la gente de aquí suele ser reservada.
Es a primera hora de la tarde cuando Daiyu descubre el motivo.
Al oír un aumento del nivel de ruido, decide finalmente dejar su papeleo, dirigirse al vestíbulo y ver la causa del alboroto por sí misma.
Tanto el personal como los clientes -incluido Bucky- se agolpan alrededor del pequeño televisor de pantalla plana, viendo al reportero de la noche anterior hablar sobre el niño londinense que atraviesa las paredes.
Pero un astuto londinense se las arregló para capturar todo el encuentro en vídeo antes de que el chico se diera cuenta de que lo estaban filmando.
Por curiosidad, Daiyu se une al grupo. Desde unos metros de distancia, cruza brevemente la mirada con Bucky, que le dedica una pequeña sonrisa.
El pintoresco cielo del atardecer londinense da paso a una habitación poco iluminada, la escena pixelada por la cámara de baja calidad. Daiyu no está muy segura de lo que se supone que está mirando; supone que el teléfono móvil del hombre estaba apuntando al suelo. -Como puedes ver, está en mi casa -susurra un británico, casi emocionado por haber captado esa misteriosa aparición. De repente, apunta la cámara hacia el chico. Entonces, el vídeo se detiene.
