My strawberry boy [JinKook]

ESPECIAL

**NOTA: 

Bieen, con este especial termina esta historia tan llena de ternura y amor. Cerrar esta historia para mí significa cerrar también la historia que ha recibido más amor en mi perfil: My boy in the water.. Por lo tanto me quedó un poquito nostálgica y vacía. 

Crear estas historias para mí fue como crear un mundo lleno de fantasías. Escribir My strawberry  boy me llevó más tiempo del que pensé, por ratos revivía los momentos tan maravillosos que viví escribiendo la historia NamMIn y no quería acabar de hablar de estas dos parejas. Sin embargo era algo que tenía que hacer: dar un cierre. Más que todo para mí. Si pudiera editar algunas cosas de esta historia, técnicamente hablando, lo haría,  pues sé que me falta mejoras algunos aspectos, pero siento que ya no me da la cabeza para más por el momento y en especial con esta historia...

Lo que puedo asegurar, sin duda, es que no quiero dejar de escribir en esta plataforma, pues me da la libertad de escribir historias ligeras de mi shipps favoritos, así que espero que sigan curioseando mi perfil y lean mis otros fanfics.

Gracias por leerme, gracias por votar, pero sobre todo gracias por dejar sus lindos comentarios, pues esos son los que me motivan a seguir creando. Mis historias no son leídas por miles de personas, pero cuando me llega la noti de que alguien ha dejado un comentario, mi corazón se llena y todos mis sentidos se inspiran para seguir haciendo lo que amo, que es escribir. 

Sin más que decir, más que MUCHÍSIMAS GRACIAS, les dejo con este especial NamMin-JinKook, espero que lo disfruten. 

Les quiere, vvinterblues.

💛💛💛

—Falta el postre secreto—Seokjin dijo, levantando las cejas.

—¿Qué es, qué es?— preguntó el chico de rizos dorados mientras sacaba su lengua, ansioso por al fin comer algo dulce.

—Ahora que puede comer lo que sea lo único que quiere es postre— Namjoon bufó y los demás rieron.

—No lo culpo- Jeongguk dijo. La flor es muy bonita y todo pero yo también me hubiese aburrido de comer solo eso, ¿verdad, Jimin?— le dijo sonriendo.

—Ujum...—Jimin asintió con un puchero. Jeongguk había llegado a caerle muy bien porque parecía entenderlo en todo. Además, gracias a él había dejado su timidez a un lado, pues desde que Namjoon les había contado que era un hada, el pelinegro no dejaba de preguntarle cosas de "su mundo", como solía decirle. Entonces Jimin hablaba con emoción de su hogar, de su familia y de sus amigos.

Por su puesto, Seokjin era más reacio a aceptar las increíbles historias que el chico contaba en un principio, pero ahora que ya había pasado más de un año, ese era lo de menos, porque había empezado a tomarle cariño al tierno novio de su mejor amigo.

—¡Sorpresa!— Seokjin dijo, sacando una hermosa tarta de fresas- Kibum trajo fresas frescas ayer y decidí hacer un pastel- dijo con orgullo.

—Yeeeii—vitoreó Jimin— Los picnics son mi nueva cosa favorita del mundo.

—Al principio decía que era yo, ahora ya perdí la cuenta de con cuántas cosas me reemplazó—Namjoon se quejó, pero Jimin lo abrazó de pronto y su semblante se suavizó.

—Sabes que eres lo que más me gusta de este mundo, Namjoonie— Jimin habló en puchero y Namjoon sonrió, dejando un beso en la frente del más pequeño, quien frunció su nariz con felicidad.