Capitulo 11.

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El atardecer entraba, por cómo se pintaba el cielo eran las 6:00 P.M aproximadamente, ¿Que haré ahora? Lo que quería ya lo tengo, solo necesito comer...

Me dirigí a un restaurante que estaba cerca de el lugar y ordené lo que comería, ingerí mis alimentos hasta que recordé tener el collar del hombre que olvido en mi rodilla, miré al cielo, aún había suficiente luz.

Termine mis alimentos, observé que el parque no quedaba lejos realmente, camine unas cuadras hasta que llegue a él, me dirigí a la banca donde me había sentado y ahí estaba el hombre sentando, sosteniendo una rosa roja en sus manos.

-Sabia que vendrías preciosa.
Me miraba con esos ojos, un color de ojos que nunca había visto, eran muy lindos pensé...

-H..Hola quiero entregarte algo que olvidaste.
Saque de mi bolsillo él collar y estiré la mano.

-Ohh, seguramente se me callo.
Tomo mi mano mirando el collar.

-Si es lindo, pero se ve que es importante para ti, te lo devuelvo.

-No realmente no lo es, pensaba dárselo a una persona fuerte y hermosa, de voluntad grande.
Me miró sonriendo.

-Espero la encuentres.

-Tal vez ya la encontré...

-Pues deberías llevárselo.

-Toma, es tuyo.

Me sorprendí ante su respuesta, nunca nos habíamos visto más que dos veces.

-Si verás, te eh visto en muchos lados, paseando por ahí, tu corazón me dice que eres muy fuerte, hace poco te vi llorando y ahora te veo feliz.

-Si.. pero no puedo aceptarlo es demasiado...

-No, al contrario, este collar tiene una triste historia, la persona que me lo dio me hizo prometerle que encontraría a una excelente dueña y con ojos hermosos también.

Me aleje un poco de él, no me gustaba el tono en el que hacía referencias hacia a mi.
-¿Cual es su triste historia?

Sonrió cerrando los ojos, los abrió de nuevo, me invito a sentarme a su lado, no di respuesta alguna sólo me senté.

-Este collar curiosamente lo llevaba puesto una mujer con ojos lindos como los tuyos.
Dijo este sin apartar su mirada de mi.

-Era hermosa, inteligente, independiente y con mucha fuerza de voluntad, todo lo que hacía se lo proponía, hasta que un día, el hombre intentó tocarla sin su permiso, ella se negó y se defendió, lo que no sabía es que eso acabaría con su vida.

-¿Murió?...

Dije con tristeza, asentó con la cabeza, desvió su mirada al cielo.

-¿Y cómo obtuviste el collar?

-Me reuniría con ella, pero tardo en llegar, así que corrí a buscarla, la encontré tirada detrás de el lugar donde vivía, me acerqué a ella me pidió que lo guardara como recuerdo de ella, y se lo diera a alguien que tuviera el mismo espíritu y unos lindos ojos...
Así que toma!

Dijo cerrando el puño de mi mano donde tenia el collar.
-¿Seguro? ¿No crees que podrías arrepentirte?

-Oh claro que no, solo permíteme ver tus lindos ojos y el collar puesto en tu cuello.

Tome el collar, lo coloqué sobre mi cuello.

-Te queda hermoso, pero creo que se termino la plática es momento de irse.

ULTRAVIOLENCE [Akutagawa x Higuchi]Onde histórias criam vida. Descubra agora