ESTUPIDO LOBO.✔

Capitulo 33|¿No le quieres abrir a tu lobito?

Pov'Jayden.

Mi padre se está pasando bastante con Mia, pero cuando voy a decir algo me llega un mensaje de Erik, diciendo que abra la puerta que ya está aquí con su mate, así que voy abrirle la puerta.

— Hola.- Digo na más abrir la puerta.

— Hola.- Dice Erika con educación, cosa que Erik no tiene ya que ni saluda.

— ¿Y Mia?

— En el comedor.- Contesto.— Estábamos desayunado.- Explico.

Creo que ni lo a escuchado, porque a desaparecido por los pasillos que lo llevarán directamente al comedor.

— Pues vamos.- Le digo a Erika y comenzamos a seguir los mismo pasos que Erik.

Cuando llegamos al comedor la puerta ya no está, se encuentra en el suelo tirada y cuando miro lo que está pasando me encuentro con que Erik tiene agarrada la muñeca de mi padre y Mia esta detrás de su espalda ya que el la protege con el otro brazo.

— Nunca, nunca en tu puta vida, le levantes una mano, porque te la corto y no estoy jugando.- Le dice en la cara a mi padre.

— Erik, tranquilizate...- Pide Mia.

— Erik.- Lo llamo y el me mira, y para que nadie escuche le que le voy a decir, se lo digo en la mente.— La estas asustando.- Digo refiriéndome a Mia.

El reaciona, suelta a mi padre y en un movimiento rápido se aleja de el comedor con Mia en su hombro.

— ¿Que mierda te pasa a ti?- Le digo a mi supuesto padre.

— Hijo, no puedes salir con esa aberración.- Dice inocentemente.

— Ni hijo, ni nada... te lo dije una vez, asi que esta no te la paso.- Digo y entonces mi puño se estalla contra su barbilla.

Los recuerdos de cuando era pequeño me invaden y entonces la rabia crece y lo único que hago es pegarle puñetazo tras puñetazo, porque no puedo parar.
Se atrevió a tocar a mi madre y aunque me costo se lo perdone, pero ahora...insulta y le levanta la mano a mi mate, eso sí que no pienso permitírselo.

— ¡Para!¡Lo vas a matar!- Grita mi madre, pero la ignoro. Esta vez no pienso parar.

Pero derrepente unos sentimientos que se que no son míos, me hacen parar de golpe y ir a por la dueña de esos sentimiento de tristeza y miedo que esta sintiendo ahora mismo.

Mia.

Al estar marcada por mi, siento sus sentimientos al igual que puedo comunicarme con ella por la menta y lo mejor de todo de que la haya marcado es que no encontrará otro hombre que le de el mismo placer que yo.

Voy rápidamente y cuando llego hasta donde me indica que esta su olor y por ende donde esta ella, me encuentro con una puerta cerrada y a Erik mirándome con una mueca de preocupación en su rostro.

— No quiere salir y tampoco quiero forzarla, esta asustada porque te a visto golpear a tu padre.

— ¿No se había ido contigo?- Le pregunto confuso.

— Después de que hablamos, se tranquilizó y fue a por ti.- Explica.— Pero se encontró con tu encima de el cuerpo de tu padre y tu madre gritándole que lo ibas a mata, se a asustado y se a metido en el cuarto, aparte de que repite constantemente de que es su culpa el hecho que tu le hayas pegado a tu padre.- Termina de contar.

— Vale...llama a tu hermano Ethan y dile que venga.- Digo, el asiente y se retira para llamar a el hermano que comparten Mia y Erik.

— Gatita, soy yo.- Comienzo a decir con cautela.— ¿No le quieres abrir a tu lobito?- Pregunta con tristeza.

— Si, si.- Dice con la voz pastosa y ronca de haber llorado.

Mierda.

No me gusta que Mia llore.

— ¿Me abres, entonces?- Vuelvo a preguntar, ya que se que esta al otro lado de la puerta apoyada y aún no me a abierto.

— Voy.- Susurra y lo escucho por mi audición desarrollada, porque si no...

Abre la puerta y en lo primero que me fijo son en sus ojos e mejillas rojas de tanto llorar.

La abrazo y ella me devuelve el abrazo con la misma fuerza, así que la agarro de la cintura, ella enrolla sus piernas en mi cadera y con ella en brazos, me siento en la cama.

— No me gusta que llores, pequeña.- Digo pasando mis pulgares por debajo de sus ojos, para limpiar sus lágrimas secas.

— No le tenías que haber pegado.- Dice mirándome con preocupación.

— Tu no te preocupes....!Nos vamos a ir de vacaciones!- Le anuncio para animarla.

Se que estas vacaciones son inesperadas, pero quiero que ella se relaje de toda la mierda que a pasado con mi padre y la bruja de Mikaela.

— Erik a llamado a Ethan y hemos concluido que nos vamos todos de vacaciones.- Le explico.

No se ni a donde iremos, porque eso a dicho que se encarga Ethan pero más le vale que valga la penas, porque si no le corto lo que viene siendo su reproductor para tener hijos.

Mia asiente y yo me dejo caer hacia atrás, para que mi espalda quede pegada a el colchón. Luego la agarro de los brazos y hago que pegue su pecho al mío, y entierro su cabeza en mi cuello.

No dejaré que nadie le haga daño.

Nadie.

Ni siquiera yo.