Sexto

367 37 72
                                    

Tu olor me esta matando

Como buena bruja y demonio la mujer volvió a la fiesta, se encontró con Sabrina, Prudente y algunas brujas de la escuela.
La pelirroja se volvió a retocar el maquillaje y volvió a bajar al primer piso de la mansión, esta vez estaba completamente sumida en sus pensamientos y en como callarlos.

Fue cuando vió a Zelda en el pequeño bar que montaron Ambrose y Sabrina bebiendo Excesivamente y conversando avivamente con Phinn que la morena ardió en celos, cuando el hombre Apretó suavemente su muslo y un sonrojo se formó en las mejillas de la pelirroja, sus ojos se encontraron y una sonrisa se asomo en los labios de Zelda cuando se acercó al oído del hombre y susurro un par de palabras que hicieron reacción en el y Lilith lo notó, pero más notó lo dispuesta que estaba Zelda a Follar con ese brujo solamente para sacarle celos.
Cuando cruzando en umbral sintió un olor que muy bien conocía, tabaco con toques de vainilla, Zelda.
Se acercó rápidamente y se puso entre ambos.

-Tenemos que hablar, ahora- Dijo altiva y Zelda comenzó a reír irónicamente.

-¿Disculpa...Mary? Estábamos ocupados...- El hombre dijo mientras le sonreía a Zelda y fue lo que detonó a la demonio.

-oh, vamos MARY, estábamos muy ocupados- Le sonrió coquetamente.

-Vete si no quieres morir ahora- Lo miró a los ojos y le hizo ver el infierno con un conjuro y quien era ella- Me alimento de tu carne, ahora vete si no quieres que te mate.

-¡Oh, por favor!- Se quejo la pelirroja viendo como el salía despavorido de la mansión entremedio de toda esa gente- No comes...Ni dejas comer...- bebió algo de su whisky y se sirvió más pero Lilith se lo quito.

-Estas ebria, Zelda- Se molesto y tomó su brazo pero Zelda se soltó rápidamente y se levantó como pudo para encararla con su mejor sonrisa, obviamente ebria.

-Jamás vuelvas a acercarte a mí- Le apuntó con el dedo y luego Sonrió seductoramente y apoyándose en la barra- Me acabas de perder, y mira lo que perdiste- Le guiño el ojo y se retiro hasta la pista de baile para buscar a alguno de sus conocidos y danzar junto a ellos.

La morena algo cansada y triste se tomó el vaso de whisky que le quitó a Zelda. Sumida en su ira y en su rabia paso junto a la pelirroja y le susurró algo en el oído.

-¿Quieres escuchar como follaré esta noche con mi Novia?- La pelirroja se volteó para mirarla a los ojos y su rostro se desarmó por completo- Eso tendrás esta noche, Querida Zelda.

-Tú no puedes...- La morena subió las escaleras y se dirigió rápidamente a la habitación.

-¡Quieta!- Grito Zelda llegando a su lado e impidiendo que abriera- No Lilith... Por lo menos...

-Ve a besarte con sus amantes Zelda, quiero tener una buena noche con MI mujer- le Sonrió y forzó la cerradura hasta que entendió que la pelirroja la encantó- Quitalo.

-...¡No!- La pelirroja se aparto viendo la ira en el rostro de la morena.

-Vas a morir si no la quitas antes, Quita el hechizo- Dijo mientras sus ojos azules reflejaban destellos rojos- ¡Que la quites!

La pelirroja se abalanzó sobre Lilith besándola contra la puerta que ella misma había hechizado, la morena respondió con rabia pero a la vez con el deseo que estaba sintiendo en aquel momento que sus labios tocaron los de Zelda.
De un momento a otro la pelirroja está contra la pared nuevamente y Lilith besando su clavícula efusivamente, esta vez sin parar ni detenerse por los miles de pensamientos en su cabeza, los olvido, aquellos labios la hicieron olvidar hasta su propio nombre.

Sin hablar se dirigieron a la habitación de Zelda y esta vez fueron directo a la cama, el vestido de Zelda cayó sobre el piso de la habitación y el traje de Lilith voló, arriba de la lámpara que Zelda tenía en su mesita de noche haciéndola trizas en el suelo, pero nada las sacó de la ensoñación.

-¡mmm¡-Jadeo Lilith mientras bajaba al vientre de Zelda y besaba cada parte de su cuerpo como si su boca quisiera lamer cada parte de su exquisito sabor y aroma.

-¡Te necesito cariño!- Se arqueo acariciando la cabellera espesa de la morena y con la otra mano acaricio uno de sus pezones encima de su brasier- ¡Ahh Lilith!

-¿Y tus bragas?- Jadeo encontrando a la pelirroja complemente desnuda y mojada.

-Se mojaron cuando... ¡Ahh!- Gimió sintiendo la lengua de la demonio jugar con su clitoris- C-Cuando...¡Ohj! ¡Por el infierno no pares!

-Habla...Zelds... ¿Dónde están...?- Deslizó dos dedos haciendo movimientos circulares.

-¡Ahhh! ¡Ay Lilith!- Gritó pellizcando sus senos- Me las quité cuando... me dejaste sola aquí... ¡Mmm! Oh, si... Sigue así...

La morena quito sus dedos y los subió hasta la boca de la pelirroja, haciendo que los lamiera y succionar, Zelda ahogo sus gritos mientras sentía las succiones de Lilith en su clitoris y probaba su propio sabor.
Lilith bajo aquella mano y Apretó su seno haciéndola venir de manera casi automática.

-¡Ohhh! ¡Ay, Lilith! ¡Lilith!- Gimió temblando.

La morena siguió embistiendo enseguida a la pelirroja con sus dedos y subió a besarla apasionadamente y entre sus labios y entre aquellos besos ambas pudieron sentir como se deslizaban suavemente las palabras y saliendo de sus bocas.

-Te amo...- Susurraron ambas y el azul con el Verde se encontraron emocionadas y complemente idas.

-Me encantas, Zelda Spellman...- La volvió a besar y esta vez fue Zelda la que volteó a Lilith besándola el cuello de manera que las marcas quedarían hasta el siguiente día.

-Tu olor me esta matando- Jadeo Zelds sin más y quito su brasier y el de Lilith, sus senos se rozaron mientras que el deseo se acrecentada entre ambas.

Zelda dejo a un lado las bragas de la morena y la encontró totalmente húmeda, su deseo creció aún más cuando Lilith Gimió en su boca y se arqueo contra su cuerpo desnudo.
Frotó su clitoris en círculo y luego bajo para introducir dos dedos dentro de la mujer sin total delicadeza, algo que a la demonio la prendió aún más, para contener aquellos gemidos tan sensuales que la morena soltaba Zelda la besó.

-¡Ooh!- Gritó meneando sus caderas y Zelda mordió su clavícula marcando la zona- ¡Zelds! Cariño...¡Ah! ¡Más, más!- Reclamo mientras que sentía como Zelda bajaba hasta su centro y comenzaba la ardua tarea.

Dos, tres...Cinco...veinte estocadas y movimientos sobre su clitoris con la lengua de la pelirroja, Lilith explotó de tal forma que Zelda pensó que en todo este tiempo la morena no había tenido ningún tipo de orgasmo.
Cuando subió a besarla se abrazaron y los besos se volvieron cada vez más lentos y llenos de ternura.
El corazón de Zelda latía como nunca y la demonio estaba completamente sumida en aquello que sentía.
Sus besos se desvanecieron y Zelda se quedo dormida en el pecho de Lilith.
.
.
.
.
.
.
.
Niñxs corrijan mis errores ortográficos por fii🥺❤ no ando concentrada y tuve que corregir muchos el capítulo anterior xd
Lxs amo muchisimo❤
Au: Nanay

Cuando Quieras DejameWhere stories live. Discover now