SHEENA +18 (COMPLETA) ✔️

(19) "Esto es real, Sheena."

Abro los ojos con lentitud. No recuerdo nada de los últimos días, es como si empezara de cero. Observo la habitación con el ceño fruncido, una punzada viaja por mi cabeza.

— ¿Sheena? — una voz hace que gire a verle. Un chico de ojos negros con traje elegante me mira con cautela — ¿Quien eres? — entorno la cabeza intentando descifrar quién es, siento que lo he visto antes pero no me acuerdo.

— Myles, Myles Leroux — murmura acercándose a mi. Niego sin saber — ¿Que pasó? — llevo la mano a mi cabeza y la masajeo.

— Has olvidado todo lo que hiciste hasta ahora. ¡Lo has olvidado todo! — susurra sin poder creerlo.

La puerta se abre y por ella entra otro hombre, unos años mayor que el tal Myles pero igual de guapo. — Es tu padre, Sheena. — abro los ojos de sorpresa.

El hombre se acerca a paso lento hasta sentarse en la cama, sonríe mirando y sostiene mis manos. — Soy Demon, Demon Lowcart — su voz me hace entrar en una zona de confort.

— Te contaremos todo para que estes un poco más familiarizada con el entorno — asiento ante la ayuda de Papá.

***

Hora y media después ya me han explicado todo. Al principio fue muy traumante saber lo que hice pero a fin de cuentas forma parte de mi pasado.

— Ahora esperas un hijo. — Eso si no me lo esperaba, llevo las manos a mi vientre y he de admitir que está un poco abultado. — Es nuestro bebé, Sheena — Un bebé, Un bebé.

— Pero yo no quiero un bebé — las palabras salen de mi boca sin control — Un bebé en estos momentos sería una carga más para mis traumas — murmuro mirando a Myles.

Una lágrima desciende de su ojo pero se que no es por lo que he dicho sino porque tiene miedo, tiene miedo a que no le vuelva a amar. — Entiendo, te entiendo perfectamente. Es tu cuerpo y tú tomarás la decisión. — se acuclilla a mi lado.

— Si decides tenerlo estaré contigo en el parto y si decides abortar también estaré para ti en el aborto — besa mis nudillos — He de admitir que yo también tengo miedo, tengo miedo de acabar criándolo como mi padre o que acabe teniendo las mismas actitudes que yo pero es un bebé, y un bebé siempre es una bendición mientras sea deseado.

Papá decide dejarnos solos para que hablemos.

— Siéntate — abro hueco para que Myles suba a la cama. Acurruco mi cabeza en su pecho, escucho los vivos latidos de su corazón. — Se que tienes miedo por todo lo que has pasado — besa mi cabeza repetidas veces.

— ¿Tu tienes miedo? — pregunto, escucho como su pecho se infla cuando empieza a reír. — K70 es el más sensible de nosotros pero yo siendo Myles tengo miedo, de hecho uno de mis mayores miedos es perderte, Sheena.

— Te quiero Myles. Muy en el fondo sigo sintiendo algo por ti aunque no sepa como expresarlo — beso su torso donde reposa su mano llena de anillos de oro.

La lleva a mi vientre y lo acaricia.

— Presiento que será niña.

Asiento ante su respuesta.

— Yo también creo que será niña.

***

— Tendrás que reposar en casa durante las próximas 2 semanas. No puede hacer nada, Sheena. Estuviste apunto de perder a tu bebé y en las condiciones en las que estás puedes seguir poniéndolo en riesgo — El doctor le entrega una hoja a Demon y luego sale de la habitación.