Vuelve a mi - Manjiro Sano

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-"Te sientes mejor?" Manjiro le preguntó apegando a la niña a su lado

Está estaba con una manta cubriendola y con una taza con té y miel en las manos, papeles sucios a su lado por haberse secado las lágrimas y sonado la nariz.

-"Me siento mejor... Gracias... Lamento haberlos preocupado y causado problemas" sorbió su nariz para luego seguir bebiendo su té

-"No has molestado para nada" Kakucho comentó, siendo este el único presente

Los demás habían salido un momento.

-"Prometo que cuando me sienta bien me voy a ir así no los fastidio" dijo suave

-"Por qué siempre piensas en que molestas?" Kakucho le preguntó tomando su mano

-"Oh- porque mi abuela y mi tia me decían eso... Si pasaba mucho tiempo con ellas molestaba, si hablaba mucho molestaba... Nunca me quisieron mucho, dijeron que fui la perdición para mamá..." dijo mirando el suelo "Y mami me decía que" sus palabras fueron cortadas por un sollozo "Que yo fui lo más bello que tuvo en su vida- y-"

El momento fue interrumpido cuando la puerta de abrió de golpe.

-"No llores más por favor!" Sanzu dijo teniendo en brazos un oso de peluche enorme y unas bolsas en los brazos "Te trajimos cosas para que juegues!"

-"Uh?" dijo alzando la mirada viendo llegar a todos

-"Te compramos algunas cositas~ si te vas a quedar un tiempo al menos debes tener algunos lujos formando parte de la organización de tu padre~ no lo crees?" Ran dijo en una sonrisa

Ella les dio una enorme sonrisa, viendo como la aceptaban en lugar de echarle la culpa por algo.

Manjiro volteó a ver a sus compañeros luego de ver el rostro de su hija.

-"Ven, vamos a abrir tus regalos en otro lado, okay?" Kakucho dijo llevandola al cuarto de al lado

Aún su lider miraba fijamente a todos ellos, en silencio.

-"Gracias..." les dijo suavemente "Gracias por traer su sonrisa de vuelta"

-"Je, eres el líder, y ella tu hija, merece ser tratada como tal, no?" Rindou comentó en una sonrisa

-"Luego podrá presumir de 'Estuve con una organización y era super genial! Todos allí eran increíbles y podrían patearles el trasero y acabar con ustedes si se meten conmigo!' sería genial" Takeomi dijo riendo "Aunque no sería bueno que fuese balbuceando cosas como esas o nos metería en problemas, pero mi punto se entiende, no?"

-"Hey Mikey, no somos tan despiadados como para dejar a la niña llorando sin hacer nada, menos siendoctu hija" Mochi dijo

-"Deberíamos ir con ella ya! Nos está esperando por los regalos" Sanzu dijo entusiasmado dejando de lado a sus compañeros

Todos lo siguieron, siendo Manjiro el último en ir.

Este se apoyó en el marco de la puerta, y observó la emoción que tenía la niña viendo todo lo que tenía a su alrededor, siendo muy amable con todos, agradeciendoles por todo, y dandoles una sonrisa llena de alegría.

Ahora tenía algo claro que quería hacer.

Quiere proteger esa sonrisa para siempre.