Harry Potter y la espada del héroe || Trilogía del héroe 1 ||

Capítulo 3

Capítulo 3 - Víctimas de la guerra

La noche cae en vísperas de la batalla: otro punto

sin retorno. Mientras "la oscuridad se desmorona" en la
luz del día, aquí está la calma antes de la tormenta, un
tiempo de esperanza y miedo y de recuerdos de última hora.

-Desconocido

"Está bien, Hermione, él está bien", dijo Ron, mientras las lágrimas volvían a aparecer en los ojos de Hermione, algo que había estado sucediendo mucho en los últimos días.

"Oh, lo sé. Es sólo ... pensé que lo habíamos perdido ..." Hermione olisqueó un pañuelo mientras decía esto.

"Yo también, yo también ... Pero él está aquí, vivo y bien ... tal vez no demasiado bien ... pero vivo al menos."

Ron y Hermione estaban sentados a los pies de la cama de Harry en la enfermería. Habían pasado dos días desde su llegada bastante abrupta y ninguno se había alejado de su lado por mucho tiempo.

"¿Cuánto tiempo crees que estará dormido?" preguntó Ron.

"No lo sé. Madame Pomfrey lo ha mantenido dormido mientras su pierna sana. Dijo que el dolor sería terrible si él estuviera despierto. No sé cómo llegó al castillo así...".

"Su pierna se ve bien ahora", dijo Ron, mirando la pierna de su mejor amigo envuelta en vendajes. Dios ... nunca tiene un descanso, pensó Ron. ¡Qué razón tenía!

"También se siente bien", susurró Harry débilmente.

Ron y Hermione levantaron la vista tan rápido que Harry pensó que podrían haberse lastimado el cuello.

"¡HARRY!" gritó Hermione, arrojándose alrededor del pecho de Harry.

"Ow- Hermione ... las costillas ... se rompieron."

"Oh, lo siento", dijo rápidamente, levantándose.

"¿Cómo estás compañero?" preguntó Ron a la ligera, pero Harry podía escuchar la preocupación en su voz.

"Multa...." respondió Harry secamente, sin ganas de discutir mucho de nada.

"¿Estás... estás seguro? Has pasado por mucho...".

"Lo sé, lo sé", dijo, volviéndose hacia Hermione; tenía lágrimas rodando por sus mejillas. "Estoy bien, Hermione, de verdad lo estoy", continuó, viendo la mirada de incredulidad en su rostro. Sabía que no lo era, pero necesitaba parecer fuerte. ¿Cómo podría ser el héroe, el salvador, si se rompió ...?

"Harry ... ¿qué pasó ... por qué golpeaste la ventana?" susurró Hermione, respirando pesadamente entre lágrimas.

"No lo golpeé a propósito", tosió Harry. "Se me acercó a hurtadillas. Estaba siendo perseguido por Mortífagos y ..."

Harry contó la historia de su huida desde Privet Drive, aunque trató de no mencionar demasiado a los Dursley, fue doloroso. Cómo había aterrizado en un bosque, había soñado con Voldemort y cómo los Mortífagos lo habían perseguido hasta la ventana del Gran Comedor. Cuando terminó, miró atentamente a Ron y Hermione. Ninguno de los dos parecía tener nada que decir. Se quedaron allí sentados en un silencio de asombro. Ambos lloraban, Hermione abiertamente, Ron intentaba ocultarlo.

"Bueno ... eso es lo que pasó", dijo Harry.

"¡Harry, te enfrentaste a siete Mortífagos!" susurró Ron, con una mirada de asombro en su rostro.

"Sí ... yo-yo-lo hice," murmuró Harry quien, ahora que estaba pensando en ello, se dio cuenta de que había causado la muerte de algunos de esos hombres. Era una sensación extraña, no los conocía y estaban tratando de matarlo, pero ...