Harry Potter y la espada del héroe || Trilogía del héroe 1 ||

Capítulo 17

Capítulo 17 || Velo y hasta la muerte

No hay grandes hombres, solo grandes desafíos que los hombres comunes se ven obligados a enfrentar por las circunstancias.

-William F. Halsey

La luz verde de la muerte salió disparada de la varita de Voldemort. Lo último que Harry vio de la chimenea fue a la Sra. Granger arrojando el polvo al piso, antes de que la luz lo golpeara y explotara en mil pedazos, arrojando escombros y humo polvoriento al aire. Harry deseó desesperadamente que el humo se disipara, y cuando lo hizo, suspiró aliviado ante la chimenea vacía, aunque estaba destruida.

Ya no podía escapar, pero la Sra. Granger sí.

El mundo giraba para Janet Granger y el viento en sus oídos era absolutamente ensordecedor. Luchó por mantenerse unida, ya que sintió el final del viaje. Abrió los ojos cuando el viento amainó y dejó de girar. Ante ella había una alfombra roja con incrustaciones de viejos. Tardó un momento en darse cuenta de que estaba tirada en el suelo.

" ¡ Mamá !"

Janet levantó la vista del suelo, con lágrimas de miedo todavía en los ojos, y miró al rostro de su hija. "Hermione," susurró. "Oh ... Hermione ..."

La Sra. Granger fue levantada por su esposo e hija. Cuando se levantó, vio que no eran los únicos en la habitación. Ron estaba de pie al otro lado del camino, sosteniendo un pañuelo de papel en el corte de su rostro y de pie junto a todos ellos había un anciano con una larga barba plateada.

"Señora Granger," dijo el hombre barbudo con seriedad. "Por favor, ¿qué causó tu retraso?"

Janet se tambaleó sobre sus pies por un momento y luego volvió a ver esa cara. El rostro de sus peores pesadillas. Una criatura sacada de una película de terror cobra vida. Ella lloró de nuevo. "Fue Harry..." gritó. "Harry me salvó de él ." Todos en la habitación supieron instantáneamente quién era ' él '.

Hermione se llevó una mano a la boca y Ron se dejó caer contra la pared.

El anciano dio un paso rápido hacia adelante, con miedo en sus ojos; sacó una bolsa de su túnica a medida que avanzaba. Después de empujarlos a todos, Dumbledore entró en la chimenea con la varita en la mano. "La residencia Granger," dijo rápidamente, dejando caer toda la bolsa de polvo flú en su prisa.

Llamas verdes rugieron desde el piso cubierto de hollín y envolvieron a Albus Dumbledore, pero algo andaba mal. Casi instantáneamente las llamas se retiraron y Dumbledore se quedó parado en la chimenea. La confusión se reflejó en su rostro por un momento antes de que se le ocurriera una razón, y su rostro perdió todo color cuando la respuesta lo enfrentó. La chimenea ha sido destruida ... Harry ... Oh Merlín, Harry ...

El mundo se volvió borroso y en el poco tiempo entre parpadear, Harry pasó de mirar el rostro de la muerte a mirar el cielo nublado. Pero algo no estaba bien ...

Había sentido una sacudida durante la Aparición; no estaba donde había planeado estar. No estaba en Hogsmeade. Harry yacía allí, sin saber muy bien dónde estaba; solo sabiendo que Voldemort no estaba aquí.

Eso estuvo bien, y otros problemas podían esperar ...

Y cuando la nieve caía levemente sobre su rostro ensangrentado, y la nieve debajo de él comenzó a enrojecerse con la misma sangre que corría por las venas del Señor Oscuro, Harry finalmente dejó de luchar y se hundió en la oscuridad.

Voces ... Escuchó voces, pero el mundo estaba oscuro ... ¿qué decían?

"Sí, la trajeron ayer ... No hay identificación, los bolsillos estaban vacíos, aparte de unas doscientas libras y esta larga daga, la daga estaba cubierta de sangre ... La cara hecha jirones, decenas de astillas acribillaron su cuerpo ... milagro está vivo. ¿Tenía este palo de madera atado a su muñeca derecha, no pudimos quitárselo, está cosido a su piel o algo ...? El brazo izquierdo estaba destrozado, al igual que su nariz ... "