43. Mi lugar es contigo

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*Sukuna*

Abrí los ojos de golpe, sudaba un poco y mi respiración estaba agitada pero me alivie al darme cuenta que todo había sido un sueño
Me talle un poco los ojos para despertar bien pero seguía confundió por ese sueño.

– Que extraño -murmure-

Mire a mi lado pero t/n no estaba

– T/n -dije en voz alta-

No recibí respuesta...
Me puse de pie, mire en el baño pero no estaba. Me asome al corredor para volverla a llamar

– T/n! -grite-

Seguía sin recibir respuesta
*Y si eso no fue un sueño?* Pense
Rápidamente mire en las demás habitaciones pero no estaba en ninguna de ellas.
Mientras bajaba las escaleras volví a gritar su nombre, el pecho comenzaba a dolerme de nuevo mientras mis ojos se cristalizaban.
La busque en la sala de estar, en el patio trasero, en el despacho hasta que un olor a comida llegó a mis fosas nasales.
Me dirigí corriendo a la cocina y pude verla a ella de espaldas, cocinando mientras bailaba con los audífonos puestos.
La observé unos segundos, me acerque y la abrace por la espalda mientras recargaba mi cabeza en su hombro

– Buenos días -dijo quitándose los audífonos- estás bien?

– Mh? -dije confundido-

– Estás temblando -dijo para darse la vuelta y mirarme a los ojos- Que pasa? -tomo mi rostro en sus manos- Tienes los ojos hinchados

– Estoy bien -le dedique una sonrisa-

– Sukuna... -dijo en modo de advertencia dando a entender que no dejaría de insistir-

– Tuve un mal sueño

– Cuéntame

Le conté cada detalle de ese horrible sueño que tuve, el simple hecho de volver a pensar en ese me afectaba de nuevo.

– Sentí que te perdía para siempre -dije en voz baja-

– Hey -dijo acariciando mi rostro- Mi lugar es aquí, contigo...

– Me molesta no haber podido hacer algo. No pude protegerte

– Solo fue un sueño

– Y si fue un aviso? Tal vez debemos tener cuidado -dije pensativo-

– Te preocupas demás, tranquilo. Estamos juntos y es lo único que importa

T/n intento tranquilizarme pero no podía. Para que ella se quedará más tranquila fingi una sonrisa

– Te iba a llevar el desayuno a la cama pero te adelantaste -dijo riendo-

Puso el desayuno frente a nosotros
Unos deliciosos omelettes, pan francés y café

– Huele delicioso -dije mirando con admiración la comida que había frente a mi-

– Provecho amor -dijo dándome un corto beso en los labios y sentandose junto a mi-

*T/n*

Terminando de desayunar ambos nos cambiamos de ropa y nos alistamos para salir.

– Ya no vendrás al colegio? -pregunto Sukuna-

– No lo sé, tengo que ir a ver a Christian para ponerme al corriente con los negocios familiares

– Entiendo, entonces te vere después

Me dió un corto beso y salió de mi casa.

A decir verdad si me preocupaba el sueño que él tuvo, como el dice "puede ser una señal"
*O hasta una advertencia* pensé

¿Esto es amor? Ryomen Sukuna x tuWhere stories live. Discover now