30 Días OTP +18.- CountryHumans.

💛Cap.10.- Con el pasivo encima.

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"A los Ojos del Mundo"

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Siria solo podía escuchar como las tintineantes monedas de caderín chocaban entre si haciendo un ruido rítmico y estruendoso, producto de todas las bailarinas en la habitación; las chicas se trasladaban por toda la habitación con sus movimientos de cadera, jugando con sus telas transparentes, haciendo todo lo posible por complacer visualmente a el país frente a ellas; lamentablemente para ellas, Siria solo estaba ahí por obligación.

- ¿Y bien Señor? ¿Qué dice? - se acercó un hombre, de su asesoría, ansioso y nervioso por su respuesta. - ¿Ya ha elegido?...

- Todas son hermosas. - opino sincero el sirio.

- Puede tenerlas todas. - contesto el hombre creyendo que había dado al blanco, pero solo recibió una mirada molesta del país.

Siria se puso de pie, mirando a todas las bailarinas, quienes detuvieron su espectáculo para mirarle impaciente.

- Son mujeres encantadoras, y estoy seguro que encontraran aun buen esposo. - les sonrió Siria a las chicas, que le miraron con emoción entre sonrojos y risillas.

- P-Pero Señor. - trato de detenerlo aquel hombre cuando noto como el país se acercaba a la salida, más fue interrumpido por la voz molesta y demandante del sirio.

- Pero yo ya tengo a quien amar... - le miro desafiante, el hombre simplemente agacho la mirada con temor. - Si me disculpan...- y sin más se retiró.

Siria se alejó del lugar soltando un gran suspiro, si que le era agobiante tener que soportar los intentos de sus mayores por hacerlo cambiar de opinión respecto a su sexualidad y su relación con Venezuela. Este ya era la tercera vez que le montaban un show con bailarinas sexys ofreciendo a todas como sus esposas, oferta que claramente ya ha rechazado muchas veces.

Realmente no creyó que el hecho de hacer pública su relación con Venezuela le trajera muchos problemas, y apenas había pasado un mes.

Y solo dos semanas desde "aquello", siempre recordar esa noche le hacía sentir cosquillas en el vientre, le dibujaba una sonrisa boba y le pintaba un gran sonrojo en sus mejillas. Ya no se ha presentado la oportunidad para volverlo a hacer, pero se sentía impaciente por tener a Venezuela tan cerca suyo de nuevo.

- ¿S-Señor? - la burbuja de fantasía en la que se había metido inconscientemente se reventó al escuchar como le llamaban. Siria giro su cabeza a su izquierda, en donde un chico le miraba impaciente. - ¿Se encuentra bien?...

- A-Ah si, si, ¿Qué necesitas? - trato de recobrar su compostura, sintiendo como incluso su rostro se coloraba más que antes, seguramente porque le atraparon mientras pensaba en cosas carnales.

- Necesito su firma en estos papeles. - respondió el chico entregándole el portapapeles y una pluma. Siria los tomo y enseguida hizo lo pedido, nervioso por la mirada atenta del chico, imposibilitándole hacer su trabajo correctamente. - ¿Seguro que está bien Señor? - pregunto de nuevo mirando extrañado el comportamiento de su jefe.