|[ Secretos De Un Emperador ]| - Empireverse

5

—¿Te encuentras bien?

Cross levanto su mirada, no esperaba encontrarse con aquella mirada de color amarillo.

El emperador Elián estaba frente a el, observándolo de manera curiosa.

—¿¡QUE DEMONIOS HACES TU AQUÍ!?— grito Cross eufórico mientras trataba de alejarse del esqueleto con coronilla amarilla.

—¿Perdón?

—¿¡Que haces en nuestro territorio?!— apunto Cross con su dedo mientras se reponía levantándose del pasto.

—En realidad-

Fue interrumpido de nuevo.

—Si piensas sacarme información no lo lograrás, yo solo le soy fiel a tu hermano— dijo mientras se cruzaba de manos.

—¡Oh! Bueno, supongo que eso está bien— dijo Elián mientras mostraba una sonrisa tímida, *¿Ese esqueleto era pareja de su hermano?*

Cross después de escuchar el comentario del esqueleto de capucha blanca, entro en razón, dándose cuenta de lo que dijo sonrojándose al instante.

—No no no no no— movía sus manos agitadamente en signo de negación —No me malinterpretes.

—¡No! Está bien, no me molesta que tengas algo con mi her-

—NO TENGO NADA CON TU HERMANO!!!

Aquel grito desesperado le saco unas cuantas risas a Elián, haciendo que Cross se sonrojara más de lo que ya estaba, el problema era que parecía una uva completamente y esto al notarlo Elián se rió un poco más.

—¡¡DEJA DE REIRTE!!— sacando su espada, Cross apunto hacía el emperador sin ningún miedo —Y mejor explícame que demonios haces aquí.

Elián un poco asustado le contesto:

—¿No debería preguntarte yo eso?— a pesar de lo asustado que estaba su voz se escucho firme.

—¿De que hablas?— contesto el esqueleto monocromático sin dejar de apuntar al joven emperador.

—No creo que esa clase de flores se den en el Imperio de la Luna— contesto Elián mientras apuntaba a la pierna del guerrero con la marca de la Luna.

Cross de inmediato recupero el sonrojo que había perdido y como pudo trato de cubrirse su pierna con su capa, tratando de aguantar el dolor que volvió a regresar.
La impresión que tuvo al ver al hermano de su emperador le hizo olvidarse por completo de aquel dolor punzante que tenía.

—Jeje— rio el emperador de coronilla al notar aquella acción tan desesperada del contrario por querer ocultar su pierna —Creo que aquí, tu eres el que está en nuestro territorio, ¿No?— pregunto con un tono de burla.

—Me largo— dijo Cross mientras se daba la vuelta para irse, y al hacerlo, noto que, efectivamente, el había comenzado a caminar en el bosque del Imperio del Sol.

—¡¡Pero tu pierna!!

—No me importa, puedo quitarme las estúpidas flores en casa.

—P-Pero... ¡¡L-La flor contiene un veneno letal!!

Cross se detuvo de inmediato, si por el fuera se dejará morir, su orgullo era tan grande que el tenía planeado quitarse aquellas flores en casa y no tomar ningún remedio, pero al pensar en "casa" recordaba a su hermano, no, el no podría dejar a su hermano.
Cross suspiro y dirigió su mirada al esqueleto de menor estatura que el. Se arrepentiría de esto después.

—¡Solo haz lo que tengas que hacer y después me largo!— dijo mientras regresaba para estar cara a cara con aquel esqueleto.

—Si, toma asiento en la piedra de allá— señaló con su dedo mientras se dirigía hacia su caballo, que por cierto, estuvo atado desde que Elián noto que aquel guerrero con la cicatriz en la mejilla comenzó a maldecir mientras se tiraba al pasto, fue por eso que se acercó.