Mi Rey De La Mafia

CAP. 10 CASA NUEVA

Me desperté con el peor de los dolores de cabeza del mundo.

Nunca había tomado como anoche.

Miro mi reloj y son las 10 de la mañana, un rato más durmiendo no me quedara mal.

Cuando trato de cerrar mis ojos para reconciliar el sueño, mi teléfono suena.

Gruño tomando la llamada.

_Paso por ti en 5_ y me corta la llamada, ay! Ángel por qué a esta hora.

Me levanto con mareos, voy al baño hago mis necesidades y me visto con un jeans corto y una blusa negra.

Ya tengo a ángel observando cada uno de mis movimientos mientras preparo litros de café para mantenerme viva.

_¿Como amaneciste?_ luego de un rato observando por fin habla.

_No muy bien_ admito_ me duele hasta la garganta_.

_Eso es por qué no dejabas de cantar las canciones a todo pulmón_ lo miro y termino mi café.

_Bien ¿que querías?_ digo, el se levanta y señala la puerta.

Me pongo mis sandalias, y salgo cuando tomo las llaves y pongo seguro.

Nos subimos en su auto y maneja durante unos minutos, para detenerse frente a un supermercado.

_Pasemos hacer algunas compras_ asiento y bajamos del auto.

Caminamos hasta dar con el supermercado.

Una vez dentro me dijo que tomara todo lo necesario, una compra completa.

Obedecí y empecé a tomar entre comida enlatada, detergente, comida chatarra, bebidas, entre otros.

Cuando salimos caminamos hasta el auto y acomodamos todo.

Manejó durante, dos minutos más y se detuvo frente a una casa, color carne, grande, con columnas y muros enormes que la protegen, tiene jardín y ventanas polarizadas, lo supe por qué por fuera parecen un espejo.

Nos bajamos y sacamos las bolsas, entramos por la puerta grande que conduce al jardín, por dentro es aún más hermosa, aunque la soledad nos recibió, desde lejos se ve que no habita nadie en la casa.

Tiene muebles color celeste y turquesa más una alfombra al rededor.

Pasamos hasta la cocina y es aún más hermosa, tienes todos los gabinetes en caoba, también tiene un comedor de 6 sillas, y cortinas turquesa cubren las ventanas.

Ordenamos todo en su lugar, ángel me indicó por dónde era el baño y cuando abrí una habitación, una hermosa cama matrimonial de color blanco estaba en medio de la habitación, tenía una alfombra que cubría la habitación completa, había un tocador y dos mesitas de noche, al lado del tocador indicaba una puerta que supuse era el clóset, abrí la que estaba al lado de la cama y era el baño, todo con color turquesa, fui y acomode todos los detergentes donde van, y regresé a la cocina.

_Bien nena, toda tuya_ lo mire pidiendo una explicación_ no es obvio, es tu casa nueva_

Mi mirada cayó, no puede ser que esto sea mío.

No lo merezco.

_Lo siento es bonito y todo pero no puedes hacerme tantos regalos como estos, el auto, la ropa y ahora la casa_

_No te preocupes princesa_ se acercó y acunó mi rostro en sus manos_ por ti hago lo que sea, y espero que te acostumbres por qué más regalos de estos vendrán_ junta sus labios con los míos en un cálido beso, sus besos son suaves, aunque nunca me e sobrepasado del límite, no estoy preparada para perder a virginia ahora y ángel lo entiende muy bien, por qué no duraría dos meses con una novia sin que tengamos relaciones_Es por nuestro aniversario de dos meses_.

_Yo lo siento tanto, olvide que era hoy, no tengo nada para darte_

_No te preocupes mami tu presencia es lo que más adoro_.

_Bien_ sonrió_ y cuando compraste está casa, tengo tanto que agradecer_.

_Lo estuve hablando con Andrés hace unos días, el me dio la idea de la decoración_.

_Tengo tanto que agradecerte_.

Me da una cálida sonrisa y vuelve a juntar sus labios con los míos.

_Bien preciosa tengo algo que hacer ahora, nos vemos en un rato_.

_Me dejaras aquí sola, y además todo lo mío está en mi otra casa, ¿que haré con ella?_.

_Eso es lo de menos nena, ya mandé a alguien a buscar todo lo que está en tu casa, en unos minutos llega, puedes acomodar todo en el otro cuarto, al lado de tu habitación_ asentí y me despedí de el.

Paseé por toda la casa, y me fijé en unas escaleras, las subí y arriba estaba el balcón, con una excelente vista, y como supuse las ventanas estaban polarizadas.

Unos minutos después, escucho un claxon fuera de la casa, bajé y abrí la puerta.

_Señorita ross_ asentí_ el jefe envío esto de su antigua casa, donde podemos acomodarlo, su auto ya está en el garaje_asentí y le señale la habitación y una vez todo dentro me volví a unir a mi soledad.

Habían varias cajas con los nombres de cada cosa que tenían adentro.

Tome tres cajas y las lleve a la habitación, ordené todo, ropas, perfumes, zapatos, entre otros.

Encendí el estéreo que se encuentra en la sala, y cante a todo pulmón, un beso de aventura, me ayudará a matar el tiempo.

Aunque tendré que acostumbrarme a dejar mi antiguo hogar tan rápidamente, fue mi primer hogar desde que empecé a trabajar y lo sentía muy cómodo.

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