Mi Rey De La Mafia

Extra 8

Antes de todo.

Ross y ángel si se hubieran conocido tipo película:

Disfruten.

Salgo de mi casa luego de ponerle seguro, la mañana está tan tibia y por eso camino para llegar a la escuela.

_Buenos días Ross.

_Buenos días señora Marta.

Todo el mundo me conoce por aquí y eso es bueno.

_Buenos días.

Escucho un auto detrás de mi pero no le presto atención caminando, me detengo en el semáforo y antes de cruzar la calle un auto se me atraviesa en el medio.

_¿Que te pasa? Maldito mal parido.

_Asi no saludan las doncellas.

_Estoy muy lejos de ser doncella y menos hablar con el extraño en plena calle.

_¿Que eres? ¿Profesora? A juzgar por los libros en tus manos y tu bolso de lana.

Los autos piden el pase pero es como si no hubiera nadie.

_Quitate del medio que hay personas que tienen trabajo.

Intento cruzar por detrás pero le da reversa impidiendo mi paso.

_Tengo trabajo.

_¿Crees que me importa?.

_¿Que quieres?.

_Tu número.

_Y ¿Crees que te lo daré?.

_No se tu dime.

Me señala los autos que tocan las bocinas y gritan groserías a nuestra dirección.

Saco papel y lápiz a las malas y apunto mi número, se lo extiendo y cuando pienso cruzar por detrás hace lo mismo nuevamente.

_¿Acaso no te cansas?.

_¿Dónde vives?.

_Ay! Por favor no me digas esto.

_Promete que hablaremos luego, pasaré por está calle todos los días.

_Y ¿Cómo diablos sabré que no eres un psicópata.

_Aun no te he matado y tampoco tengo la intención de hacerlo.

_Esta bien, está bien_ le doy el si cuando los autos se quedan sin hacer más, el toma su rumbo y respiro profundo caminando para terminar de cruzar la calle.

De alguna manera ese extraño me alegró la mañana.

Mi teléfono empieza a sonar y dejo los libros de lado para sacarlo de mi bolso y responder a la llamada desconocida.

_¿Disfrutando de la vista?.

_¿Quién habla?.

_Tu admirador secreto.

_Genial ahora tengo un admirador.

_Mira hacia atrás.

Volteo rápidamente para encontrarme con el mismo auto de ahorita.

_¿Eres un pedófilo?.

_¿Te llevo a tu escuela?.

_No gracias aún quiero seguir con vida.

Se parquea a mi lado haciendo que giré los ojos.

_Me dejarás ir o no.

Me señala el camino y empiezo a caminar nuevamente pero el me sigue siguiendo.

Apuro el paso pero soy tan estúpida que seguro no me doy cuenta de que es un auto el que me sigue.

_Ok ya basta, pareces un psicópata.

_Pero no lo soy.

_Ya deja de seguirme.

_Mi empresa queda hacia allá, no te estoy siguiendo.

Empiezo a caminar nuevamente y veo la gloria cuando veo la escuela.

Es la primera vez que me alegra tanto verla.

_¿Oye estás soltera.

_Por favor!.

_Tranquila cenicienta.

_Y ahora ¿Por qué cenicienta?.

_Se te quedó un zapato.

Bajo la vista a mis pies dándome cuenta de que casi llego a la escuela descalza, me bajo para sacar el zapato de la estúpida sanja en la que entró.

_¿Necesitas ayuda?.

¿Cómo diablos no me di cuenta de que se me había salido un zapato.

Mis libros caen al piso cuando por fin saco el zapato, caigo sentada de culo y es cuando ese hombre fornido sale de su auto.

_¿Estás bien? Mérida.

_¿Mérida?.

_Le huyes a los hombres.

_Le huyo a los hombres que me están acosando.

_No te estoy acosando.

_Y resulta que mi acosador es un fan de Disney_ le digo desde el suelo.

_Me gustan las princesas.

Mi cara se pone roja en un instante, me ayuda a levantarme del piso y recoge mis libros para darmelos.

Me pongo el zapato y me aseguro de que esté bien.

_Nos vemos.

Se sube al auto y no me muevo hasta que lo veo desaparecer.