La vida dictada por un sombrero (Por RhiannanT)

El verdugo

 Severus  se sintió esperanzado , en cierto modo, al ve que Harry estaba empezando a confiar en Poppy; al menos era capaz de confiar, y sin embargo, mientras Severus observaba al chico someterse silenciosamente al tratamiento de Poppy, tragando sus pociones con solo una mueca de protesta, descubrió que no quería estar allí. Ver lo rápido que el chico llegó a confiar en Poppy solo le arrojó sus propios defectos a la cara.

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Mientras tanto, Harry miró a la medibruja con disgusto mientras sostenía otra poción.

"¿Qué hace?"

"Es una poción antibiótica. Evitará que la infección viaje a su sangre y la limpiará si ya está allí. Infecciones tan graves como las suyas son extremadamente peligrosas si no se tratan.

"No lo quiero".

" Lo necesitas, demasiado" Poppy empujó la poción hacia Harry, quien volvió la cabeza obstinadamente. Ya estaba atrapado por la noche en la que no quería estar. Estaría condenado si dejaba que esta mujer lo alimentara con otro brebaje repugnante especialmente diseñado para hacerlo vomitar . El último sabía a lo que olía, a abono: podrido. Apenas había logrado contenerlo.

"Bien, entonces," dijo la medibruja, frunciendo el ceño, "déjame decirte esto de esta manera: de una forma u otra estás tomando esa poción. Puedes dejar de hacer tanto alboroto y tomarlo por tu cuenta o puedo llamar al profesor Snape y él puede hacer que lo aceptes, pero tienes que tenerlo ". Se sentía mal usando el miedo del chico al profesor de esa manera, pero no podía imaginar cómo hacer que el chico bebiera la poción de otra manera, y realmente necesitaría la ayuda del profesor si Harry continuaba negándose. Merlín, por favor no nos obligues a seguir ese camino. El chico está lo suficientemente traumatizado por un día.

Harry le devolvió el ceño fruncido, pero no dijo nada, y la medibruja vio el cansancio y el miedo persistente escondido detrás de su ceño fruncido. Ella suspiró. El niño estaba claramente al final de su cuerda, pero  realmente necesita la poción, y ella tampoco podía permitirse el lujo de dejar que  desafíe al  personal médico.

Ella empujó la poción hacia él de nuevo. Esta vez se lo quitó, pero no hizo ningún movimiento para quitar el corcho.

Muy bien, Harry. Si esa poción no desaparece en diez segundos, llamaré al profesor Snape ". Harry solo miró la pared como si fuera la cosa más fascinante del mundo, fingiendo no escuchar.

"Diez." Harry se puso rígido pero no dijo nada y no miró hacia arriba. ¿Crees que CONTAR me va a asustar? ¿En serio?

"Nueve." La mirada de Harry se movió de la pared a la cara de Madame Pomfrey, tratando de decir si hablaba en serio, antes de volver rápidamente a la pared. Supongo que lo hace.

"Ocho, siete." Harry escuchó el canto de un pájaro y miró por la ventana, todavía rígido. ¿Qué está haciendo?

"Seis, cinco". Harry trasladó su mirada al suelo a los pies, poniéndose más rígido al hacerlo. De acuerdo, tal vez me moleste.

"Cuatro". Harry apretó las rodillas contra su pecho y las rodeó con los brazos a la defensiva. Estaba asustado. Estúpido. Debería haber tomado la maldita poción. Tal vez no. No voy a dar marcha atrás, ahora.

"Tres." Harry escondió su rostro detrás de sus rodillas, agarrando la botella de pociones con fuerza.

"Dos." Harry simplemente se agarró con más fuerza. No va a funcionar. No tengo miedo de ti o de ese idiota viscoso y NO tomaré esa estúpida y repugnante poción.