Extra || 07

3.1K 243 129
                                    

Un chillido llama la atención del rubio que estaba en otra habitación, se dirige hasta donde viene el ruido.

Ve al pequeño Katsu mirar confundido a su gemelo que llora con todo lo que puede, su garganta se podría lastimar de lo fuerte que llora.

Douma se acerca hasta él y lo carga, le da unas cuantas palmaditas en la espalda, respira el olor de su bebé, huele a miedo, está asustado, pero ¿de qué?. Mira a su alrededor para buscar que pudo haber sido lo que asustó a su pequeño, a decir verdad también le aterra que haya algo que haya asustado a Ikki, Ikki nunca había llorado del miedo, nisiquiera con Muzan-sama.

— ¿Qué viste Ikki?, ya no te preocupes, aquí estoy yo, mamá te cuida — siguió meciendo a su bebé mientras seguía buscando con la mirada.

Pronto, siente una presencia que conoce muy bien.

— Buenas noches Douma-dono — dijo el demonio blanco de los peces asomándose de su vasija.

Suspira de alivio, sólo era Gyokko. Tal vez fue su apariencia lo que asustó a Ikki.

— ¿Por qué no me avisaste que vendrías? — preguntó mirándole de forma seria — Asustaste a mi bebé —.

— Creí que lloraba de lo hermoso que soy... — rió soltando algo de saliva.

— Siéndote sincero, luces como el culo — se dió la vuelta para abrir su yukata y acercar al bebé a su pecho para que empezara a amamantar y se calmara.

— Ay, y tú muy bonito — se quejó por la ofensa.

— No olvides que tú fuiste uno de los Alfas que me querían marcar — empezó a reír aún sin voltear a verlo.

— Bueno, ahora que estas con Kokushibo-sama eres repugnante para todos nosotros — relamió sus labios de forma asquerosa.

— Me alegro — sobaba con suavidad la espalda de su cachorro que empezó a relajar su respiración agitada.

— Entonces, a lo que venía, ¿cómo has estado?, también vine a conocer a tus niños — cambió el tema moviéndose para estar al frente de Douma.

— Estoy bien, no han habido muchos problemas, y si quieres ver a mis hijos primero cambia tu forma, los asustas — pidió mirando al ojo dorado en la frente del pez.

— ¡Kokushibo tiene tres pares de ojos!

— Él es su papá, no te compares con él — refutó viendo como el otro suspira y empieza a cambiar su forma, una figura más humana, bastante pálido, de ojos dorados, labios verdes y cabello morado.

— ¿Así esta mejor? — pregunta levantando los brazos.

— Mucho mejor — se acercó a la cuna donde seguía Katsu y lo sacó.

— Ah, que lindos, ¿son gemelos? — dijo al ver que ambos bebés son bastante parecidos.

— Ajá

— Se nota que los hicieron con amor, piel blanca, ojos arcoiris, cabello de un intenso rojo, son toda una maravilla — empezó a aplaudir con emoción de ver a ambos niños.

— De hecho, fueron un accidente — aclaró tranquilo.

A la nariz de Gyokko llega un fuerte aroma a leños, tan fuerte que da comezón y molesta, es Kokushibo, y esta enfadado.

— ¿Qué haces aquí? — pregunta de forma que parecía relajada, pero por su olor y mirada intensa Douma y Gyokko sabían que no estaba relajado.

Más que enojado, estaba furioso, se sentía invadido, ¿cómo se atrevía ese asqueroso pez a meterse a su territorio y asustar a su pequeño hijo?.

— Sólo vine a ver como estaban y a conocer a sus cachorros Kokushibo-sama... —  respondió nervioso empezando a sudar.

— ... No quiero verte, me das asco, eres repugnante, y sobre todo, aléjate de mi familia, si sigues aquí para cuando cuente tres te arrancaré los ojos y cada extremidad de tu cuerpo de la forma más dolorosa que te puedas imaginar — en un parpadeo el demonio blanco desapareció.

Douma le mira con cierta emoción.

— ¿Qué sucede?

— Dijiste "familia" — sonríe alegre, contento por lo que acababa de decir su Alfa.

Las mejillas pálidas del demonio mayor se pintan de rosa, su mirada y gesto siguen intactos, pero su olor enojado y picante se había vuelto suave y relajante.

El pelirrojo sólo se acerca al Omega para abrazarlo y llenarlo de su olor a leños, con cuidado de no aplastar a los bebés que el rubio cargaba.

🌸🍥🌸🍥🌸

Fuaaaa, hace cuanto no actualizaba esta cagada?

En fin, sólo quería escribir algo sobre Kokushibo siendo medio territorial-

Tal vez en los siguientes extras ponga a los niños más grandes o algo, ya veré que mierda se me ocurre-

Por cierto, me siento de la vErga, pero la imaginación me llegó justo ahora, así que aquí estoy, con dolor general y sin poder soportar la luz del celular

Y me compraron unos tenis con cerezas que me recordaron al Douma de mi historia ü

Nos vemos(?

Nine months [KNY]Where stories live. Discover now