╭⋆🌷♡🐅🐧
├───ৎ⿻𑁤⋆ ❝Son dieciséis❞
ChaeYoung estaba enamorada de Mina, por eso, hace dieciséis razones para conquistar a la mayor
- Unnie, ¿por qué dieciséis?
- Es mi número favorito.
ChaeYoung tenía todo fríamente calculado.
🌷𑁤 MiChaeng. Mina;...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Un mes después.
Al fin habían salido de vacaciones, les habían dado los resultados de su semestre, habían presentado las pruebas que les ayudaban a subir las notas y habían hecho el papeleo debido para tener el último semestre asegurado.
Y eso, para ChaeYoung y Mina era música para sus oídos.
Hace un mes atrás, cuando la menor de las dos conoció a la madre de la mayor, Mina la había invitado a pasar una tarde en su casa a lo que ChaeYoung dijo que luego de acabar el problema de sus padres.
Lo resolvieron... Y vinieron los montones de exámenes.
Así que se vieron obligadas a posponer esa tarde que, con el pasar de las semanas se había convertido en "pijamada".
— ¡ChaeYoung, pequeña! — la señora Myoui babrió la puerta sonriendo a la chica de hoyuelos.
— Buenas tardes, Han. ¿Cómo estás? —saludó con total informalidad a la mujer, obviamente, a pedido de ella.
— Muy bien, gracias por preguntar, voy de salida a comprar unos ingredientes para la cena, Mina me acaba de contar que te ibas a quedar unos días — dijo la mujer negando con su cabeza por la tardanza de información de su hija.
— ¿U-unos días? — preguntó ladeando su cabeza. Las dos habían acordado un solo...
Como sea, unnie siempre cambia las cosas a último momento. Pensó dejando sus zapatos en el recibidor.
— Les dejé el almuerzo hecho, tardaré un poco, ¡no hagan locuras! — y luego de dejar un dulce beso en la mejilla de la chica se fue.
— ¡Mocosa! — ChaeYoung gritó asustada sintiendo unos brazos apresarla por la espalda y alzarla en el aire.
— ¡Unnie! — carcajeó mirando como era llevada a la cocina. Fué dejada en una silla y, al fin, pudo ver la cara de su novia.
Estaba con ropas de hogar y algo despeinada.
Se sonrieron y juntaron sus labios unos segundos.
— ¿Tienes hambre? — preguntó la mayor peinando sus cabellos.
— Un poco, unnie...— dijo ladeando su boca. La mayor asintió y, con total cariño sirvió la comida en el plato y se lo dejó a la menor en frente — ¿Usted no va a comer? — preguntó mirando a la mayor sentarse a su lado y peinar su cabello.
— Comí hace rato, mocosa — dijo. La peliamarillo miró con un puño en su mejilla y sonrió — Te manchaste... — murmuró estirando su mano envuelta previamente en un pañuelo para limpiar con delicadeza la mancha de la menor — ¿Qué tal si vemos una película? Hace rato busqué algunas y se ven interesantes...— ChaeYoung, con su boca llena asintió emocionado.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.