El Chico Del Sombrero (Camilo Madrigal X Male Reader)

01.

_La herencia de la bisabuela.

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La noche cubría al bello pueblo de encanto, todos festejaban por aquel mágico acontecimiento que se llevaba a cabo. Mientras todo encanto se regocijaba por el nuevo Don del integrante más joven de los madrigales, un joven montado en su caballo color avellana con manchas blancas, se adentraba a aquella comunidad.
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Me sorprendí al llegar al famosísimo encanto, pues se veía desierto, saque mi reloj de bolsillo para verificar la hora, era tarde, pero no tanto como para que todos estuvieran dormidos, aunque esto era solo de lejos, pues miraba todo el pueblo desde del monte, tal vez haya más personas de lo que aparenta, solo necesito bajar.

-espero no haberme equivocado y llegar a un pueblo fantasma, ¿verdad pepe?- el cuadrúpedo solo sacudió su cabeza y soltó un leve relincho -lo mismo digo, hay ojalá y pudieras hablar... bueno sigamos, ya nos falta poquito, vamos pepe pica papas-

Antes de que mi corcel pudiera avanzar un montón de pájaros se dirigieron al pueblo también observe a un jaguar que iba hacia la misma dirección que las aves.

-tal vez el gato solo está casando y los pájaros emigran... mejor sigamos, vamos pepe arre- murmure en un tono no tan bajo.
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-si todo era mi imaginación ¿cómo me corte la mano?, yo nunca podría dañarle la noche a Antonio ¿enserió es lo que crees?-

-lo que creo es que hoy fue un día difícil para ti-

-eso no... uh, solamente cuidaba a mi familia y tal vez yo no sea, superfuerte como Luisa o divinamente perfecta como la señorita perfecta Isabela y su hermoso cabello del sueño, pero... ah ya no importa-

-Ojalá pudieras verte como yo lo hago, eres perfecta, tal cual eres, eres igual de especial que cualquier otro en esta familia-

-Aja, tú sanaste mi herida con una arepita con queso-

-sane tu herida... con mi ¡amor por mi hija!, con su ¡maravillosa mente!, y ¡bello corazón!, y ¡lindas gafas!, ¡Ay te amo cosa linda!-

-¡Ya!, yo sé lo que vi-

-Mira, mi hermano Bruno perdió el camino en esta familia, no quiero que te pase a ti... ve a dormir un poco, te sentirás mejor mañana-

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Para mí poca sorpresa no había rastro de un ser humano cerca, solo en un sitio, una casa a las orillas del pueblo, una casa enorme, personas salían de ella, yo me hacerque para ejecutar mi plan, me empece a acercar a la gente que se retiraba de ahí.

-hola, buenas noches, perdón por molestarla, soy ___, ___, soy bisnieto de la señora Catalina, que en paz descanse, no sé si la conozca-

-A si, la señora Catí, la de la casa vieja y abandonada, me acuerdo de ella-

-esa mera, verá ahora yo vivo ahí, y quería saber si me podría dar trabajo o me podría recomendar con alguien, es que de verdad me urge una chamba-

-perdón chino, pero por ahora no me urge alguna ayuda, los Madrigales son los que naturalmente me ayudan, pero pregúntale a uno de los Guzmán capas y te ayudan con tu problema- me dijo señalando a un muchacho que iba acompañado de una mujer ya mayor