the first archangel. ( supernatural )

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ANTES DE LEER:

Finalizando el capítulo se encuentra una parte escrita en letra cursiva, esto quiere dar a entender que es un recuerdo, para que no se confundan.

Lamento no haber actualizado antes, pero el verano de la universidad no me deja respirar y hasta ahora puedo terminar el capítulo.

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Después del fiasco intentando encontrar la primera espada y enterarse que los ángeles y los Winchester le están pisando los talones Aurora decidió que era momento de intervenir. El cielo estaba desesperado intentando encontrarla y ella no iba a desaprovechar esa oportunidad de atraer al más débil y codicioso de sus "hermanos".

Había enviado a distintos demonios a viajar por el mundo con artefactos fundidos con poder que simulaba el suyo, de eso ya había pasado una semana y todavía no tenían ninguna respuesta de los demonios. Lucifer estaba ocupando su "tiempo libre" para aterrorizar a los pocos demonios que quedaban en el infierno, y a cualquier desafortunado idiota sobrenatural que se le cruzara en el camino.

—Si alguno de esos demonios inútiles no cruza esa puerta con un ángel en la próxima hora, voy a matarlos a todos.

Los demonios frente al trono se sobresaltaron, el miedo se podía palpar en la sala como una masa de agua que amenazaba con ahogarlos sin una ventana para salvarse. La desesperación se asentó en lo profundo de sus oscuras almas mientras intentaban abandonar la sala del trono con vida.

Una vez la puerta fue cerrada tras el último demonio aterrorizado una explosion sacudió los pasillos cercanos a la sala del trono, el arcángel dentro de la sala miró con exasperación el hueco en la pared a su derecha, la frustración se estaba apoderando de ella al punto de tomar control de sus acciones.

Si tan solo pudieran tener algún tipo de ventaja.

Lo daría todo por tener aunque sea la más mínima información.

Mientras Aurora era víctima de su frustración y su desesperación, Lucifer se encontraba en los calabozos del infierno aterrorizando a los prisioneros, un enorme sabueso del infierno a su lado añadiendo a su aura de terror. El demonio de rodillas frente a él estaba temblando como una hoja, la sonrisa en el rostro del arcángel estaba llena de intenciones asesinas, sus ojos tan rojos como la sangre miraban al demonio como si pudiera leer a través de él.

—Mi hermana se está volviendo impaciente, la falta de información la está desesperando—el arcángel giró la espada de ángel en su mano.

—Los ángeles están escondiéndose—la voz temblorosa del ángel se escuchó por primera vez desde que Lucifer ingresó en la habitación—, creemos que pueden estar tramando algo.

—¿Algo?—un gruñido de sabueso resonó en la pequeña celda—¿Qué sabes?

—Lidere el último equipo que salió a investigar, escuchamos que los Winchester estaban cerca del templo de las gracias.

El "rey" del infierno inclinó su cabeza hacia el techo de la celda, casi como si estuviera procesando la información que acababa de ser revelada. Después de lo que se sintió como una eternidad para el demonio que esperaba su sentencia el arcángel se dio la vuelta moviendo su mano en una señal que a cualquiera le hubiera parecido una señal de desinterés, pero para el sabueso que lo acompañaba era una clara señal de permiso para convertir al pobre demonio en su cena.

Sus pasos no se escuchaban, cada vez que giraba en un pasillo sorprendía a los demonios que estaban intentando escapar en silencio, la satisfacción que sentía al ver a los demonios correr en dirección contraria hacía crecer la sonrisa en su rostro. Si no se pudiera sentir su aura asesina cualquiera podría decir que parecía un niño que acababa de cometer una travesura.