Me gusta mi maestra de estadística.

¡SI! ¡TENGO MALA SUERTE!

Hasta cierto punto, al estar caminando con Neithan aun de la mano, el comenzó a cantar la leyenda del hada y el mago, canción que yo también iba cantando, si bien es una de las canciones que más le gustan a él, me divierte verlo cantar, y sé que a él le divierte ver que yo le sigo la corriente, somos dos locos que van cantando una canción tomados de las manos y no, nos importa que la gente se nos quede viendo feo, aun somos jóvenes debemos de disfrutar un poco más de nuestra juventud.

 Ya no quedaba mucho para llegar al centro, sabia a donde íbamos, era un pequeño comedor que quedaba escondido, entre varias casas, pero el lugar era bastante cálido y barato.

 Debíamos de pasar por el jardín para poder llegar al comedor, pero al estar cruzando la vi a "ELLA" iba acompañada de tres jóvenes, se veían mayores que nosotros, sus amigas quizá; me detuve en seco jalando a Neit de la mano, solo para que el viera hacia donde yo estaba viendo, "ELLA" no me habia visto aun, era un alivio, al parecer Neit entendió mi mutismo y mi vista fija, así que el me tomo con su otra mano libre jalándome, haciéndome caminar.

-¡Vamos que esperas!.- me grito mientras me jalaba, ese hecho me dio risa, solo le seguí el ritmo.- ¡No puedo creer que la que dice ser inmutable se haya inmutado!.- gritaba mientras me seguía jalando, mientras el me jalaba pude ver como "ELLA" se detenía junto a sus acompañantes.  Esto era malo así que soltándome de una de sus manos, me voltee hacia el y le sonreí.

-!Vamos¡.- le dije - ¡debemos de llegar ya, muero de hambre!.- grite mientras echaba carrera con el atrás de mí, pasando a un lado de "ELLA" inevitablemente, y sin querer chocamos miradas, por un momento me sentí feliz de verla, pese a que habia dicho que no la quería volver a ver, sin más remedio que correr y sintiendo su mirada en mí, delate el lugar al que íbamos en primer lugar.

Esperaba que no nos siguiera, porque si eso sucede puede ser fatal.

Para nuestra suerte nuestra mesa favorita estaba vacía, era una mesa de dos puestos uno enfrente del otro, y quedaba a un lado de la puerta y estaba atrás de un soporte bastante grueso, pero si veías bien se notaba que habia alguien ahí.

Una vez que los dos nos tranquilizamos, comenzamos a reír, más por lo que habíamos hecho, me sentía como un niño que hizo algo que no debía de haber hecho. Me sentí bastante feliz, algo que no habia sentido desde hace bastante tiempo.

Luego de haber parado nuestras risas, llego la señorita que nos iba a atender solo dejando la carta, para después venir a pedir nuestra orden, la cual nunca variaba.

-¿Quieres pedir lo mismo de siempre y compartir? ¿o pedimos otra cosa?- me pregunto Neit, viendo la carta.

-No realmente, quiero la mismo ¿y tú?- le pregunte mientras dejaba mi celular a un lado de mí.

-No, quiero lo mismo de siempre.- respondió mientras dejaba su celular en el centro de la mesa, para después tomar el mío y ponerlo a un lado del suyo-

-Buenos días ¿Puedo tomar su orden?.- pregunto la señorita 

- Buenos días.- contestamos al unísono.-  Si, vera queremos un club sándwich, y unos panqueques con huevo y tocino, además de dos bebidas italianas de manzana y zarzamora, y dos frapes de chocolate blanco.- contesto de manera simple sin ver la carta, y tomando mi carta para juntarla con la de el, para entregarla a la señorita.

-Claro, en unos minutos se lo traigo.- dijo para después irse a la cocina a dejar el pedido.

-Siempre tan casual, pero ¿porque dos frapes?, es un frape y un café expreso.- le sermone 

-Ya has tomado bastante café, bebe otra cosa.- contesto para después verme y alzar la cejas en dirección a las nuevas personas que estaba entrando.-¿Sabes? antes de que voltees, no vallas a gritar, ni hacer nada, has como que no has visto nada, ¿Quieres?-