No supe mas que fue lo que paso con Alcina esa madrugada, y no me iba a importar, poco faltaba para que Cristal llegara, pero las aventuras están a la vuelta de la esquina, su ex había llegado y fiel a mi palabra lo estaba esperando en la oficina del bar.
Un traje a tres piezas negro, camisa en negro y corbata gris casi dando la tonalidad de negro, tacón cómodo, y un peinado ajustado con algunos mechones sueltos.
Un café en el escritorio y mi computadora revisando las finanzas de cada persona, poco a poco el dinero volvía a ser un monto aceptable, y la gente comienza a tener miedo de lo que puede o no pasarles.
Un pitido indicaba que el hombre estaba entrando al bar por la puerta trasera, a nada de tenerlo frente a mí.
Un golpe en la puerta revela a mi visitante.
-Buenos días. -dije mientras veía entrar m a mis hombres y a este sujeto.
-Buenos días. -respondieron todos.
- Bien los negocios son primero. -dije mientras sorbia mi café. - ¿Quieres un poco de café? -pregunte.
-No. -
-Recuerde sus modales. -dije en advertencia. -Mis negocios pueden esperar la escuela no, sigamos. Bien, como puedo ver no tienes buen gusto por la vestimenta y no puedo dejar que estes a mi lado vistiendo de esa forma. -me detuve señalando su ropa. -Alguien te dará un traje, cámbiate. Nos vemos abajo. -dije a modo de despedida.
- ¿Esa es la educación que tú tienes? -soltó de golpe.
-Mi tiempo vale oro, si alguien que desde el inicio no da un saludo de cortesía deja mucho que desear y mi cortesía no va a acabar contigo. -respondí viéndolo.
- ¿Ni siquiera sé que es lo que voy a hacer? -
-Solo es una actuación, después de todo tú y yo conocemos a la persona, esto aseguro te saldrá natural si al igual que yo solo quieres joder. -respondí.
- ¿A quién? -
-Cariño eso no se pregunta, pero si te interesa es a Alcina tu ex. -
- Me ordenaste que la dejara en paz, si algo aprendí de ti es a no joderte. -
-Que buen aprendizaje, siendo honesta, casarte fue un juego de niños, algo simple. -
- ¿Que planeas? -
-Para tu saber nada, para el mío demasiado, una lástima que solo me servirás unos pocos días, no muchos, a decir verdad, como sea, si intentas algo contra mi déjame decirte que en efecto inmediato vas a morir sin importar el lugar donde estes. -
- No comprendo cómo...
-No me interesa tu incompetencia, eso es todo. -dije haciendo un gesto con la mano.
El hombre fue alzado y llevado afuera no sin antes gritar.
- ¡¿Ni siquiera se tu nombre?! -
- Araceli. ¿El tuyo? -pregunte.
-Dimitri. -
-Bien. Llévatelo. -
Como se esperaba de la eficiencia no tuve que esperar demasiado recargada en auto, donde estaba Sebastián esperando a mi lado.
- ¿Está segura de esto? -pregunto.
- ¿Cuándo no he estado segura de alguna situación? -
- ¿Quiénes te están cuidando? -
-Inicialmente tú, y Eric, aunque hay más hombres observando y listos para disparar. -
- ¿Está segura de su plan? Aun podemos cambiar las cosas. -
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Me gusta mi maestra de estadística.
RomanceAra una alumna de universidad, con malas notas en algunas de sus materias menos preferidas como estadística nivel uno. lleva un año con esta materia que no es su agradado sacando en esta la nota mínima para pasar la materia, pero un día su antigua m...