Love Harmful [Parte 2]

Capitulo 28

T/n Malfoy

2 de Febrero

Muchas cosas habían pasado, pero dentro de lo que cabe todo está bien. Más o menos.

Draco, Tom y Mattheo tratan de ponerse al corriente desde que el año comenzó. Claramente yo ya lo estoy y solo trato de ayudar en lo que pueda.

La última prueba de los tres magos de llevará a cabo en dos semanas, Cédric ha estado muy nervioso, los estudiantes de Beauxbatons y Durmstrang ya están aquí, Dumbledore tiene todo listo, pero Dumbledore sigue sin querer iniciarlo.

Año nuevo no fue lo que esperaba, Mattheo y Tom se la pasan metidos en el estudio viendo donde está su padre, al parecer está trabajando con Max y eso tiene a todos nerviosos.

No doy ni tres pasos sin que tenga a diez personas sin seguirme y saber cómo estoy, Mattheo tiene a los mejores y más fieles siguendome y diciéndole como estoy.

Mi madre piensa que debo distraerme con el torneo de los tres magos, así que llama a Cédric todas las tardes para que me distraiga sobre todo lo que está pasando.

Debo admitir que todo esto es demasiado fuerte y no tengo palabras para decir cómo me siento.

Mi madre conversó con Mattheo y ambos me hicieron hablar con un profesional sobre lo que me pasó, y como me siento.

Por otra parte, Mattheo me sigue cada que puede, si no está haciendo planes junto a Tom y Steven está conmigo.

Trata de hacerme sentir segura, cada que puede como si nada pasara, cómo si un loco que causalmente es hermano de mi novio se obsesionó conmigo y ahora intenta matar a todos a mi alrededor, y despertó de la muerte a su padre lunático que quiere matar al mejor amigo de un amigo.

Si así de complicada es mi vida.

Hoy iré a Hogwarts para ver si puedo soportar la presión social que las recientes cosas que en mi vida me han pasado. Eso dice el Psicólogo.

Mattheo me acompañará, solo él.

Draco quiso ir pero el Psicólogo no lo permitió, solo una persona de confianza debe ir contigo, citó sus palabras.

—¿Estás lista?— pregunta Mattheo desde afuera de mi habitación.

—Si bajo en un segundo.— dicho esto pasos lejanos me hacen verme al espejo.

Soy la misma de antes. Me repito muchas veces tomando mi bolso.

Bajo las escaleras donde todos me esperan, Draco, Tom, Blaise, mi madre, incluso Ron vino.

Todos me observan mientras bajo las escaleras.

—¿Estás lista?— pregunta mi madre.

—Solo será un día no moriré por eso.— declaró cuando viene a abrazarme.

—¿Segura que quieres hacer esto?— pregunta Draco.

—Si ella quiere irse se irá no estará ahí si no lo desea.— explica Mattheo desde la puerta.

—Bien...

Salgo de la casa junto a Mattheo, los mortifagos ya nos están esperando...

—¿En verdad quieres hacer esto?— pregunta cuando subimos al auto.

—No... Pero debo hacerlo...

Sonríe mientras pone una mano en mi pierna.

—Todo estará bien...

***

Vine a Hogwarts hace unos meses y eso no me afecto en nada, pero está vez es distinto, no quiero estar aquí, tengo que hacerlo...

Bajo del auto entrando a Hogwarts...

Hay muchas personas en el patio que se percata de mi presencia.

—Si... Ya me arrepentí.— declaró para Mattheo el cual me ve de reojo.

—¿Quieres irte?— pregunta rápidamente.

—No lo sé...

—Si quieres irte solo debes decirlo...

—Bien...

Camino hasta el interior de Hogwarts bajo la mirada de todos, no sé si me miran por los que pasó o porque mi mano está entrelazada con la de Mattheo Riddle.

Hay muchos estudiantes de Beauxbatons y Durstrang.

—Me iré un momento.— avisa Mattheo cuando un Mortifago vienes a el. Yo asiento y el flaquea, pero se aleja.

Sigo caminando mientras soy la mirada de muchas personas, las estudiantes de Beauxbatons me observan con curiosidad al ver que todos me observan...

Me detengo en un momento y le pido algo de tomar a mi custodiador y en ese momento escucho...

—¿Por qué todos la miran?— dice alguien.

—¿No lo sabes? Fue secuestrada por meses, nadie sabía de ella... Todos la creían muerta...

El Mortifago regresa con un agua y mientras tomo un sorbo un chico se acerca a mi.

—¿T/n Malfoy?— pregunta pero mi custodiador no lo deja seguir.

—¿Quién eres?— pregunta.

—Soy...

—Lo conozco... Manuel.— sonrió.

—¿Cómo estás?— pregunta.

—Bien supongo...

—Al parecer te has vuelto popular estos días...

—¿Todos saben de mi regreso?

—¡Claro! Literalmente todos aquí saben que volverás... Debo ir a clase fue un gusto saludarte.— y después de eso sale en dirección contraria y se pierde entre las personas.

Camino por un pasillo vacío donde... Oh por dios. ¡No pude ser! Cómo no lo vi venir.

—¿Dónde está Mattheo?— le pregunto al Mortifago.

—No lo sé señorita, pero...

—¡Búscalo ahora!

—Como ordené...— uno de ellos va por la dirección donde veníamos y seguí caminando.

Ya no había tantas personas en el patio así que decidí ir a él, pero en el camino me encontré con Mattheo.

—¿Pasa algo?— pregunta alarmado.

—Creo saber dónde está Max... Y tú padre...