Love Harmful [Parte 2]

Capitulo 50

T/n Malfoy

—Llegaste... Te estaba esperando amor.

Mi cuerpo se detiene mientras el se levanta de la silla con toda la tranquilidad del mundo.

Retrocedo unos pasos mientras no creo lo que veo.

—¿Qué?— dice al ver mi acción.

—¿Cómo...?— digo sin aliento. —¿Cómo es que estás aquí?

—Es mi habitación... Pero no quiero estar aquí...

Camina hasta la puerta y la abre.

—¿Vienes?— después de eso la cierra.

Mi mente está en blanco y con rapidez corro detrás de él.

Abro la puerta y me doy cuenta que ya no estamos en mi casa.

Hay un bosque y con rapidez pudo identificarlo, es la cascada, dónde Tom y Draco nos descubrieron.

Lo veo en la orilla del lago mientras desabrocha si camisa negra.

—¿Quieres nadar?— me pregunta con una sonrisa. —Hace mucho calor y el agua está deliciosa...

—Espera... ¿Cómo es que estamos aquí?— digo acercándome a él.

—¿No me quieres?— dice derrepente

Mi boca rápidamente contesta.

—¿Por qué dices eso? Claro que le quiero...— digo con una sonrisa.

En ese momento me di cuenta, no necesito nada en el mundo, poder, dinero, joyas... No necesito nada si estoy con él.

Me acerco a la orilla y suelto mi cabello mientras quitó mi falda y blusa. Veo a lo lejos a Mattheo en el lago, está sonriendo mientras ve que me convenció.

—Ves todo esto... Estos son nuestros inicios...— comentá mientras sale del lago hacia mí. —Necesitas estar en tranquilidad... Para librarte de todo...— me toma de la manos.

Y en ese momento mi sueño termina, no precisamente un sueño, pero me doy cuenta de la verdad.

Me suelto de su agarre mientras me alejo.

—¿Qué eres? ¿Quién te mando?— pregunto totalmente sería. —¡Contestame! ¿Qué eres?

La cara de "Mattheo" cambia completamente a una de decepción.

—Pense que duraría más...

—¿Qué eres? O mejor dicho ¿Quien eres?

—¿Cómo que quien soy querida?— se ría burlonamente. —Soy tú... Soy tu subconsciente que exclama libertad y que despiertes...

—¿Mi subconsciente?— digo con burla. —Dime un chiste mejor...

—¿No lo crees? Soy la parte más profunda de ti que sabe que lo que haces te afecta más a ti que a los demás... Eres tan débil... Fue tan fácil engañarte y traerte hasta aquí...— sonríe mientras comienza a acercarse a mí. —Soy la parte que hará que recibas todo lo que viviste... Y te haga pensar con claridad.

—No necesito pensar con claridad, gracias, me encuentro en perfectas condiciones.— me doy la vuelta para regresar a dónde la puerta está, pero en cuanto me acerco a ella está desaparece. —¿Qué mierda hiciste?— le digo a "Mattheo" pero cuando volteo ya no es un Mattheo ahora es alguien Igual a mí, pero de hace mucho tiempo, cuando conocí a Mattheo en concreto.

—Yo no hice nada, soy tu subconsciente no tengo poder en tu mente...— me dice.

—¡¿Entonces por qué la puerta no está?!— declaró enojada.

—La puerta no se fue, pero llegará cuando sea el momento, porque en lo más profundo y oscuro de tu corazón sabes que necesitas ésto...

—No necesito nada...

—¿No? Y que tal si te digo que se que pasa con Mattheo en estos momentos.. ¿Eh?— dice. —¿Igual te importaría...? O...

—Solo cierra la boca...

—¿No quieres saber cómo está Mattheo?— pregunta.

—No, solo quiero irme de aquí...

Justo en ese momento dos puertas aparecen. Supongo que es una por cada una.

—Nos vemos en el infierno.

Camino con rapidez hasta l puerta y la abro. Efectivamente otro maldito juego, la puerta desparece cuando la atravieso, detrás de esta solo hay unos escalones negros, el ambiente es completamente negro, todo lo es, es un lugar oscuro...

Camino escalera abajo mientras pienso cuándo terminará está tortura...

Camino y camino, pero no hay nada más que escalera, cuando derrepente los escalones se esfuman.

Ya no hay más, pero yo no me doy cuánta hasta que caigo en un lugar igual, completamente negro, pero este es diferente algo dentro de mi se remueve y miles de sentimientos vuelven al lugar de donde vinieron.

Pero no me dijo vencer, comienzo a caminar por minutos mientras nada está por los alrededores, todo es negro y llega un momento dónde algo dentro de mí se rompe.

Me siento en eso suelo con las sensaciones en la garganta y...

—¡Tu ganas! Si quiero saber dónde está Mattheo... Solo quiero saber que está bien... Que al morir no sufrió y dónde sea que esté no esté sufriendo...— digo con lágrimas. —Ya no quiero estar aquí...— rompo en llanto mientras trato de pensar.

Se hace un nudo en mi garganta.

—Dime... ¿El está bien? ¿Está feliz? ¿Encontró la paz...? ¿Me observa desde donde está...?

En ese momento una brecha se abre y mi otro yo aparece.

—Solo quería que lo aceptarás...

Camina hasta mi y me da la mano. La tomo y me levanto del suelo mientras suspiró.

—Esa es la puerta para regresar... Pero quiero contestar tu pregunta antes... El esta bien, siempre está contigo, desde el día que se fue siempre ha estado contigo y nunca se ha ido de tu lado... Te observa todo el tiempo y... Está feliz, muy feliz de verte todo los días, no le molesta lo que pasa entre max y tú z de hecho está muy contento de que el te haga reír en ocasiones... Pero el nunca estará en paz hasta que tú lo estés... El te ama... Y demasiado.— dice.

Camino hasta la brecha, y antes de entrar observó a mi otra yo.

—¿Hago lo correcto?— le pregunto.

—¿Lo correcto? No, no haces lo correcto, pero a su debido tiempo te darás cuenta.

—¿El anillo era real?

—Si lo era... El quería pedirte matrimonio, pidió tu mano a Draco y Narcissa y le pregunto a Tom si le daba permiso... En otro momento serán felices... Pero no hoy, ni mucho menos mañana...

Regreso la vista a la puerta y camino hasta ella, entro...

Despierto en la habitación de Mattheo, miro a mis alrededores y... Veo en anillo en el suelo..

Mi amor...