Hold On To Me (Sofia & tu)

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Maratón 2/3

Tarde demasiado en la maldita audición para que al final me dijeran que tenia que regresar el día de mañana, ya que había sido una de las tres finalistas.

Mire mi reloj dándome cuenta de que ya eran las seis en punto, iba retrasada.

– Disculpe, ¿falta mucho?.- le pregunte al taxista.

X: Estamos llegando señorita.

El auto freno frente a un enorme edificio, saque un par billetes y se los di diciéndole que no me regresara cambio. Entre casi corriendo por la puerta principal siendo frenada por un guardia de seguridad.

X: ¿Puedo ayudarla?.

– Tengo una audición.

X: Lo siento, los señores ya se están retirando.

– ¿Qué?.- pregunte frustrada - Pero apenas son las seis.

X: A los señores les gusta la puntualidad. Ahora si me permite...- señaló la salida.

Bufé molesta y camine a paso lento hacia la salida. Pero antes de dar un paso hacia la calle me detuve un momento a mirar sobre mi hombro al guardia de seguridad, quien ahora se encontraba distraído platicando con una chica.

– Es ahora o nunca.- susurre.

Regrese mi andar hacia dentro del edificio tratando de ser sigilosa y pasar desapercibida. Cuando creí que lo había logrado el guardia me vio lo que me hizo actuar de manera rápida y correr lo más rápido que pude.

X: ¡Detente, no puedes entrar!.- escuchaba que me gritaba.

Corri hacia arriba sin saber a donde ir. En mi camino tropecé con una chica quien se quejo por el golpe.

– Disculpa.- dije mirando detrás de mi asegurándome que no me seguía nadie - ¿Sabes donde son las audiciones?.

X: Tercer piso.

– Gracias.

Seguí corriendo hasta llegar al tercer piso, abrí la puerta de golpe y entré ante la atenta mirada de los dos hombres.

X: Las audiciones acabaron.- dijo en tono grosero.

– Tuve otra audición, por eso el retraso, por favor... déjenme audicionar.- supliqué.

X: He dicho que las audiciones acabaron.- repitió.

– Pero... ¡solo me retrase diez minutos!.

X: ¿Estas sorda?.- pregunto - Tu impuntualidad te hace poco profesional, no quiero verte audicionar y será mejor que no vuelvas por aquí.

X: Yo quiero verla.- dijo una voz femenina detrás mío.

– Ella quiere verme.- sonreí. El hombre me fulmino con la mirada mientras que la chica desconocida reía.

X: He dicho que no, y no voy a cambiar de parecer.

X: Scoot...

X: Ariana, no voy a tolerar que siempre hagas tu santa voluntad.- agrande los ojos al escuchar el nombre de aquella chica.

Gire sobre mis talones encontrándome con la mirada marrón de la mismísima Ariana Grande. Que analizandola bien, era la misma chica con la que choque en los pasillos, solo que por las prisas no logré reconocerla.

Ariana: No pierdes nada en darle una oportunidad, Scooter.

Scooter: Sabes que odio la impuntualidad.