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Maratón 1/3

Dos días habían pasado desde la fiesta de bienvenida de las chicas. Sofia y Paulina habían viajado al día siguiente a L.A, para visitar a sus padres.

El día de hoy viajariamos a Milán, por lo que me encontraba arreglando la pequeña maleta que llevaría. Por la mañana, la llamada de mi cuñada me había despertado diciéndome que el vuelo se había retrasado, por lo que estarían llegando pasando el medio día.

Deje la maleta cerca de la puerta y recogí los dos peluches que Sofi habia dejado en el sofá el día de ayer.

Cuando el reloj marcó el medio día, agarre la maleta y la baje al estacionamiento del apartamento, para después regresar y tomar las últimas cosas que faltaban, como lo era mi celular, mi pasaporte y mi dinero.

Mire por última vez la sala de estar, cerciorandome que no me olvidara de nada. Cuando estuve completamente segura camine hacia la puerta, pero antes de poder salir la persona con quien menos esperaba encontrarme, estaba afuera de mi apartamento.

Ryan: Necesitamos hablar.- me miró fijamente con esos orbes avellana cargados de molestia.

El chico se veia realmente mal, lo que me causó un poco de lastima. Las ojeras debajo de sus ojos me indicaban que probablemente no había dormido y por el olor alcohol que se apreciaba a kilómetros, juraba que se había entretenido toda la noche tomando.

- No... vete.- intente cerrar la puerta pero el se adelanto y termino entrando - ¡Ryan, por Dios!.- retrocedí unos pasos. Nunca es bueno estar cerca de un hombre ebrio.

Ryan: Necesitamos hablar.- volvió a repetir - Necesito... que me escuches.

- Lo siento... pero no tengo nada que escucharte.

Ryan: ¡VAMOS HABLAR!.- gritó de manera autoritaria, asustandome.

- Ryan... ve a casa, date un baño y te prometo que hablaremos.

Ryan: ¿Crees que soy imbecil?.- lo vi apretar la quijada - Estoy consiente de mis actos, no te preocupes.

- No es bueno momento para hablar, debo salir ahora mismo.- intente escabullirme por un lado pero en ese intento termine presa en sus brazos.

Ryan: Tu no saldras a ningún lado.- me aventó de nuevo hacia adentro.

- Por favor Ryan... tu no eres así.- intente que entrará en razón.

Ryan: ¿Por qué ella?.- pregunto ignorando mi comentario.

- Porque la amo.- murmure con miedo.

Ryan: ¡NO! ¡TU DEBES AMARME A MI!.

- ¡En los sentimientos no se mandan!.- grite reteniendo mis lágrimas. Estaba asustada - Por favor Ryan, déjame ir.- supliqué.

Ryan: Se que viajaras a Milan. Sofia y Paulina irán contigo.- frunci mi ceño completamente confundida.

- ¿Cómo sabes eso?.- el chico soltó una risita.

Ryan: He seguido cada uno de tus pasos.- abrí los ojos con sorpresa - Le adverti a Sofia que yo nunca perdía.

- Esta enfermo.- intente de nuevo pasar sobre el, pero de nuevo sus fuertes manos agarraron mis brazos y me lo impidieron.

Ryan: No compliques más las cosas, niña tonta.- me lanzó al suelo.

- Vete de aquí o gritó.- me arrastre hacía atrás al ver que se acercaba - ¡VETE!.- grite con desesperación.

Hold On To Me (Sofia & tu) Où les histoires vivent. Découvrez maintenant