/39/

597 44 2
                                    

Sofia termino recostandome en la cama, sus manos vagaron por todo mi
cuerpo haciéndome erizar por completo. Esta sería nuestra primera vez juntas y la verdad me aterraba un poco. Anteriormente habíamos tenido este tipo de encuentros, pero siempre terminábamos siendo interrumpidas por algo o por alguien.

Por falta de aire, Sofia bajo sus besos suavemente hacia mi cuello, besos húmedos que me exitaron al punto de arruinar mis bragas. Todo mi autocontrol se estaba yendo al carajo y ahorita, lo único que estaba anhelando era tenerla entre mis piernas.

Sentí su mano vagar por debajo de mi playera de la pijama, su toque era tan suave y estremecedor. Cerre mis ojos disfrutando de sus caricias y sus besos, pero de un momento a otro paro de repente haciéndome soltar un bufido de frustración. ¿Acaso no se había dado cuenta de cómo me tenía?.

¿Qué sucede?.- abrí mis ojos encontrándome con su mirada.
Mi voz salió ronca a causa del placer.

Sofia: Había olvidado que era tu primera vez.

¿Eso ahora importa?.

Sofia: No lo sé... supongo que si.

¿Qué hay de ti?, ¿Chloe fue buena en la cama?.- ella soltó una risita y negó. Ahora me sentía estúpida por haber hecho esa pregunta.

Sofia: Nunca me acosté con ella.- me sorprendió escuchar aquello - Todo el campus creía que conocía perfectamente la cama de la Chloe, cuando mi realidad es otra.

¿Eres...?

Sofia: ¿Eso ahora importa?.- hizo la misma pregunta que anteriormente yo le había hecho.

Bueno... las veces que hemos estado a punto de intimidar... me has tratado como si tuvieras el conocimiento.- dije un tanto confundida.

Sofia: Pero no lo tengo, y ni siquiera se si estoy haciendo las cosas bien.

¡Vaya!.

Sofia: Si... vaya...- nos quedamos en silencio.

Será mejor que nos acomodemos para dormir.- hable de nuevo.

Sofia: Será mejor que me vaya.- se levantó. Un horrible vacío se formó dentro de mi a causa de sus palabras.

Con esto me confirmaba que no teníamos la suficiente confianza que las parejas debían tenerse. Parecíamos dos malditas desconocidas.

Claro... - mi voz salió en un susurró - ve con cuidado y cierras bien por favor.

Me acomode dentro de mis cobijas, sintiendo como mis ojos se llenaban de lagrimas las cuales estaba reprimiendo, no quería que Sofia me viera débil ante ella, no merecía verme de esa forma.

Sus pasos se escucharon alejarse, para después escuchar como se abría y se cerraba la puerta.

Mis lágrimas salieron como cascadas mojando inmediatamente mi almohada. Estire mi mano hacía mi celular y busque el número de la Latina.

Camila: ¿_____?.- pregunto somnolienta.

– Camila... v-ven a mi departamento.- dije como pude.

Camila: ¿Qué sucede?, es casi la una de la mañana.

– Solo... ven. Te necesito.

Camila: Dame diez y estoy contigo.- la llamada se corto y mis lagrimas volvieron a salir con fuerza.

Hold On To Me (Sofia & tu) Where stories live. Discover now