Yuri on Ice! x OC x Haikyuu!! [¿Una Nueva Gata En La Cancha?]

●○Capítulo 43○●

Quedaba poco más de un mes para el Grand Prix. Rin había vuelto a su rutina, pero cada vez estaba más estresada. Y su rendimiento escolar estaba al límite.

Muchas veces en clase se quedaba ensimismada, pensando en la competición, o en otras cosas que tenía que hacer antes de viajar a su primer destino, la Copa Rostelcom, en Rusia.

- ¿Rin? ¿Vienes? - Ryo estaba de pie, a su lado, esperándola, mientras ella estaba apuntando algo en uno de sus cuadernos.

La clase había terminado hacía 5 minutos, y todo el mundo se había ido ya.

- ¿Eh? - levantó ella la cabeza, y al darse cuenta de la situación, empezó a recoger deprisa.

- Tenemos que ir a comer antes de que se acabe todo - le dijo el chico amablemente, mientras la ayudaba a recoger sus cosas.

*Nota de autora: No sé vosotr@s, pero a mí, personalmente, Ryo me parece un cielo... Me lo imagino como un chico genial, pero muy tímido, aunque vale la pena conocerle.

- Lo siento, de verdad. Es solo que estaba... - se empezó a disculpar ella.

- No te preocupes, te entiendo perfectamente, por eso te he esperado - le sonrió el rubio. - Kenma y Kuroo han dicho que luego nos verían, que iban a coger sitio.

- Vale - la chica asintió y salieron ya juntos del aula, en dirección al comedor.

Una vez ahí, consiguieron su comida, y se fueron a sentar con sus amigos.

Todos empezaron a comer mientras conversaban sobre sus cosas y se reían.

Rin recibió un correo electrónico de la organización internacional de patinaje artístico, y tras leerlo, volvió a su ensimismamiento. Simplemente observaba la pantalla del móvil, mientras analizaba cada uno de los movimientos de sus rutinas en su cabeza. Cada giro, cada salto, cada pequeño movimiento de muñeca.

- ¿Chibi-chan? - la llamó el moreno que estaba a su lado. ¿Estás bien?

Ella pareció no reaccionar, y es que en realidad ni siquiera le había oído de lo absorta que estaba.

- No la presionéis estos días, por favor... sé que puede ser difícil verla así, pero le ayuda, por alguna razón - explicó Ivan, que estaba sentado al lado de Ryo. - Sí no contesta, es porque hay algo muy grande en su cabeza... y necesita controlarlo ella sola.

- Pero... no ha probado la comida - dijo Kenma mirando su bandeja.

Literalmente se había dejado su ensalada de pollo y su manzana sin probar.

- Se lo guardaré para luego. A lo mejor ahora no tiene hambre. - dijo Kuroo cogiendo la comida de la chica para guardarla en su bolsa de deporte.

- Gracias, Kuroo - le agradeció Ivan.

En realidad era muy raro que Rin no estuviera riéndose y hablando con ellos, pero todos intentaban entender lo difícil que debía ser todo aquello para ella.

- ¿Cómo va en clase? - preguntó Ivan.

- Tiene sus momentos, pero normalmente si copia las cosas de la pizarra. De todas formas, yo me encargo de sus apuntes de clase y si necesita que le repita alguna explicación, aquí estoy - dijo Ryo.

- Gracias - susurró ella levemente, como si eso último lo hubiese oído - Gracias a todos.

Volvió en sí y les sonrió avergonzaba.

Tras sonar el timbre, tuvieron un par de clases más antes del entrenamiento.

Rin se dirigió al gimnasio, pero esta vez no acompañó a los chicos en su calentamiento, simplemente se sentó en un banco, para descansar.