CAPÍTULO 27

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-Profe, háblenos diga algo- Nathan no quería aceptar eso

-Gerardo deje sus cosas- Evan también ignoraba la realidad

-¡¡Profesor Henry no nos deje...por favor!!- Aila ya no quería estar ahí

-Profesor lo necesitamos...¡¡NO NOS DEJE CON ESTA MIERDA!!-

-Nathan, el ya no está con nosotros- le dijo Evelyn con la voz entrecortada

-Hay que centrarnos en Trevor- propuso Santiago

-Yo estoy bien solo...solo duele un poco-

-¡¡IGNATENKO, OLIVER, VENGAN RÁPIDO!! y tú resiste- Aila estaba desesperada

-No creo aguantar más-

-Cierra la puta boca y escúchame: Tú vas a vivir porque- Trevor la interrumpió

-Ya perdí mucha sangre no puedo más-

-¡¡MELISSA DESPERTÓ!! Vas a resistir e iremos todos juntos para verla ¿Ok?-

-¿Cómo qué despertó?- en ese momento llegaron los dos oficiales lo montaron en una camilla improvisada y se fueron a la casa de Nathan para que su mamá lo ayudará.

¿A dónde vas? Es difícil mantener el ritmo, te estás moviendo tan rápido dejándome atrás, dame una hora eso es todo lo que necesito es ahora o nunca. Me estoy quedando sin tiempo

-Necesito más algodón- la mamá de Nathan les dijo que la bala no logró perforar ningún órgano y sólo necesitaban una transferencia de sangre, afortunadamente Santiago era compatible y pudo donarle un poco

-Aquí está mamá-

-Gracias hijo, lleva a Santiago a la cocina para que pueda comer algo- ordenó y Nathan lo llevó, pero cuando llegaron vieron a Aila llorando

-Pastelito no llores por favor-

-Él lo mató y no pude hacer nada para salvarlo-

-Claro que hiciste algo: vengar su muerte matando al que le disparó- dijo Santiago -Creo que me desmayaré. ¡Ahí te voy San Pedro!-

-No seas dramático, si perdieras litros de sangre ahí si te la creo pero ya ni Trevor está así- contestó Aila -Ve a correr a esos pedazos de basura, yo le preparo algo para que no se nos vaya-

-Está bien, ya veré que me invento-

-Muy bien, te puedo hacer un sándwich y un...lo primero que encuentre voy a preparar y te lo comes-

-No has escuchado la palabra "tacto"-

-No, ¿Se come?-

-Olvidalo, tendré que decirle a mi mamá qué necesitas ayuda urgente-

-Si me va a enseñar a cocinar entonces si-

Mientras tanto Nathan intentaba decirle a Emmanuel e Irene que no podían estar ahí, entonces recordó las palabras del profesor

-Tenemos que leer cosas confidenciales pero pueden quedarse en él sótano- era algo cruel pero no había otra opción, así que le pidió a dos soldados que iban con ellos transportar a los "jóvenes rescatados" al sótano y dando la orden clara de no quitarles ni la vista ni el seguro a la puerta, sonaba cómo un secuestro pero la carta del profesor era confidencial

-¿Nath porque nos llevan al sótano?- cuestionó Irene

-En primera no me digas "Nath", en segunda los llevan porque necesitamos hacer cosas confidenciales y no pueden escuchar por seguridad, tercero si se van a quedar en mi casa van a obedecer mis órdenes y por último no quiero que hablen ni pregunten-

-¿Nos podemos quedar aquí un tiempo?- pidió Emmanuel

-No hay más habitaciones, pero podemos adaptar el sótano-

-Está bien, no causaremos molestias-

-Pero tendrán que ayudar con los quehaceres de la casa, no quiero holgazanes y si quieren comer lo harán- sonaba cruel y duro pero tendrían que hacer eso los soldados no se estarían arriesgando en vano pues los señores Langford les brindaron asilo en lo que todo volvía a la "normalidad" -Llegamos, pasen y pónganse cómodos- dijo y se fue dejando órdenes claras en los dos soldados que vigilaban el sótano

Fue por la carta y llamó a todos para leerla en voz alta y conocer las "respuestas" que no sabían a qué se refería el profesor

-¿A que se refiere el profesor con "respuestas"?- Evelyn no sabía y estaba igual que todos

-No lo se pero habrá que leerla- respondió Evan

Los segundos son despiadados, estoy indefenso mientras siguen volando, atrapado aquí en el desierto, siento cómo si estuviera en un reloj de arena, quizá pueda quedarme y estar cómodo viviendo en el pasado

-Se escuchará feo pero ojalá y nos diga cómo acabar con el director- Aila tenía un rencor hacia aquel hombre

-Ok voy a abrir el sobre- dijo Nathan

-Si quieren nosotros nos retiramos- propuso el señor Langford

-Concuerdo con tu papá, es algo confidencial y solo ustedes deben saber el contenido de esa carta-

-Está bien mamá- aceptó Nathan y sus padres fueron a su habitación Oliver e Ignatenko se quedaron en la puerta para vigilar pues corrían riesgo de ser atacados

Demasiado rápido, intento seguir pero estoy perdiendo la esperanza y ahora estoy caminando solo, me siento tan frío sin llegar a ningún lado, siento que estoy en cámara lenta. Solía ser un ganador, ahora soy el final de la pila...Una polvorienta foto

En el aireWhere stories live. Discover now