CAPÍTULO 33

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-¡¡AILA TEN CUIDADO!!- gritaba Nathan pues la chica estaba cerca de una ventana

-¡¡LO SÉ, PERO YA NO TENEMOS CÓMO BLOQUEAR ESTA VENTANA!!- ella trataba de mantenerse calmada pero ver a tantas personas muriendo a causa del aire y los disparos le causaba cierto miedo

-¡¡PODEMOS TRAER ALGUNAS MADERAS DEL SÓTANO!!- sugirió Emmanuel

-¡¡CIERTO, OLIVER VE CON ÉL- ordenó Nathan y su padre decidió acompañarlos por las cosas, en ese instante se sintió un temblor que asustó mucho a Aila ya que le daban miedo -¡¡APÚRENSE POR FAVOR!!-

-Hay soldados aquí afuera- susurró Evan

-¡¿QUÉ DICES?! ¡¡NO SE ESCUCHA NADA!!- Santiago logró ver que Evan estaba hablando

-¡¡HAY SOLDADOS AFUERA NECESITAMOS ARMAS PARA DEFENDERNOS SI NOS ATACAN!!-

-¡¡IGNATENKO VAMOS POR ARMAS AL ESTACIONAMIENTO!!- dijo Trevor y fueron ambos a buscarlas, mientras Nathan intentaba tranquilizar a Evelyn que comenzaba a tener un ataque de pánico y Evan buscaba algo para distraerla pero su mente estaba en blanco

-¡¡AQUÍ ESTÁN CADA UNO TOME UNA!!- Ignatenko les repartió las armas cargadas y con refuerzos mientras escuchaban a los soldados decir que no debían salir pero en eso las personas comenzaron a acercarse cada vez más y los soldados atacaban

-¡¡NO CREO QUE ESTO SEA UNA SIMPLE COINCIDENCIA...HAY ALGO MÁS AQUÍ!!- la madre de Nathan comenzaba a preocuparse por las familias de Trevor y Evan

Los gritos y pequeños temblores causados por las bombas de gas lacrimógeno era lo único que se podía escuchar en los alrededores y el miedo en todos ellos aumentaba pues al ser la única casa en estar cubierta de las ventanas los ponía en la mira de los protestantes; convirtiéndolos en un blanco para atacarlos. Para su sorpresa los soldados del gobierno los estaban cuidando por alguna extraña razón; no pasó mucho tiempo para que una pequeña granada de gas explotara cerca de la ventana que se encontraba desprotegida y la rompiera, al ver esto Aila logró cubrir su cuerpo con una manta y darse vuelta pues no tuvo tiempo para alejarse pues los vidrios rotos volaban por toda la zona cerca de ella, algunos cristales lograron hacerle pequeñas heridas pero no pasaban a mayores

-¡¡TRAIGAN UNA MADERA GRUESA PARA CUBRIR ESTÁ VENTANA!!- gritó uno de los soldados mientras tanto Aila se levantaba para revisar que todos estuvieran bien sin darse cuenta de que unas personas lograron arrebatarles sus armas a los soldados y ahora les apuntaban

-¡¡AILA CUIDADO!!- Nathan intentó correr hacia ella pero una madera pequeña lo hizo tropezar por lo cual no llegó a tiempo y Aila recibió un disparo cerca del abdomen -¡¡CARAJO, AILA MIRAME!!- su amiga estaba en una especie de shock

-Me duele mi estomago- mientras decía eso dirigió sus manos a su vientre -¿Por qué está sangrando?- sus lágrimas comenzaban a salir -Duele mucho, Nath duele- a Nathan le dolía ver a su amiga en ese estado pero lo único que podía hacer era presionar un poco la herida

-Tranquila ya pasará, no te duermas- suplicó

-Pero tengo mucho sueño- se quejaba la pobre chica; mientras los soldados colocaban la madera mientras le decían a alguien que ella estaba herida para luego disculparse con aquella persona en la radio

-Hijo dame permiso hay que curar su herida- Nathan obedeció a su mamá y ella comenzó a revisar a la chica -Tiene suerte la bala apenas rozó su vientre- por un momento se asustó -Lleven a Evelyn a la cocina tiene que comer algo- ordenó ya que vió como está comenzaba a tener otro ataque de pánico al ver la escena con Aila

-Aila no te duermas por favor- Santiago no sabía qué hacer así que decidió decirle aquellas palabras -No te duermas- por más que quisiera Aila no podía negarse al sueño y comenzaba a cerrar sus ojos

-Que no te duermas carajo- Nathan le dió una cachetada y ella reaccionó inmediatamente

-Toma su mano por favor- Irene le decía a Santiago que tenía cara de no entender -El alcohol duele mucho y hay que ponerle también en su rostro- dijo aclarando las dudas del chico

-¡¡AHHHHH!!- se quejó pues la cachetada le había regresado el conocimiento -¡¡MALDITOS HIJOS DE SU...DUELE!!- a pesar de estar herida y haber llorado no dejaba de maldecir a quien le disparó y eso mismo alertó al papá de Nathan que venía cargando una parte de la madera gruesa para la ventana

-¿Qué le pasó a mi hija?- aún cuándo Aila no era su hija biológicamente la consideraba como una pues sus padres nunca estaban con ella y la mayor parte del tiempo solía pasarla en esa casa

-Le dispararon papá- respondió Nathan

-¡¡ESPERO Y AHORA SE ENCUENTREN SATISFECHOS PEDAZOS DE BASURA HUMANA!!-

-Ni herida dejas de gritar esas palabrotas-

-Ya está sólo necesitas reposo por una semana- la mamá de Nathan logró parar la sangre y evitar que pasara a mayores

-No, todo menos eso mamá- se quejo la chica

-A pero querías estar cerca de la ventana, eso te pasa por curiosa-

-Callate Nathan, no me interrumpas en medio del drama-

-¿Estás bien, no te duele nada?- Evelyn no dudó un segundo en ir a verla apenas y se tranquilizó fue corriendo

-Claro que estoy bien, ando fresca como una lechuga- al intentar levantarse el dolor se volvió insoportable

-Ya se calmó todo hay que descansar, yo cuido aquí- dijo el papa de Nathan

-Me quedó a acompañarlo- Evan le susurró a Evelyn que tenía que cuidar a Aila

-Tenemos que ir por sus familias- Nathan se dirigía a Trevor y Evan -No podemos dejarlos a su suerte, así iré por ellas- advirtió y comenzó a preparase

-Yo voy contigo-

-No, estás herida así que por primera vez obedece instrucciones- Aila parecía no importarle estar herida pues pensaba que era algo sin importancia -Santiago llévala arriba por favor- 

-Claro, vamos Aila- Santiago pasó el brazo de Aila por su hombro para llevarla a la habitación mientras Nathan iba por las familias de Trevor y Evan.

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