CATORCE

40 7 1
                                    


《Sólo una vez y cambiaste lo que significa el tiempo, ahora un segundo es igual a la medida de extrañarte tanto...》


Seokjin esperaba impaciente la cena con Larissa, estaba sentado en un pub cerca del apartamento de Larissa, tomando whisky ya casi a media noche, bebió hasta lo último y decidió salir de ahí, llegó a su auto y lo encendió.

—En dos días la volveré a ver -sacó su móvil, buscó el contacto de Larissa, por impulso y necesidad la llamó mientras conducía.

—¿Hola? -dijo la voz femenina y adormilada del otro lado del móvil.

—Perdón, creo que te he despertado, no se por que te he llamado -dijo un poco apenado, pero sentía la necesidad de verla.

—Calma, no pasa nada ¿ocurre algo? -su voz se escuchaba mejor.

—Realmente no, solo quería escuchar tu voz antes de irme a dormir -Larissa soltó una pequeña risa.

—No entiendo que es gracioso para ti -se quejó Seokjin.

—Qué querías escuchar mi tediosa voz antes de dormir, Seokjin ¿a caso estas borracho? -volvió a reír.

—Si, de echo, estoy rumbo a tu apartamento -rio, afortunadamente estaba muy cerca, se había decidido por ir a verla, quería y deseaba eso.

—Oh no, dime que no es así -dijo nerviosa.

—Eres divertida, pero es verdad ábreme -dijo Jin serio ya muy cerca de su edificio.

—Seokjin no, debes estar bromeando -aún más nerviosa.

—Porque no sales para que te convenzas de que no bromeó -alardeo.

—Seokjin -dijo.

—Sal, por favor, quiero verte -pidió, la sangre de Larissa corrió más fuerte por sus venas, sintió sus mejillas arder.

Larissa se levantó de golpe y salió de su habitación sin hacer el más mínimo ruido para evitar despertar a las chicas y alardear así que corrió a la ventana y se asomó, lo que vio la dejo atónita, Seokjin no había mentido.

Seokjin estaba ahí, esperando por ella.

—Dios mio -se llevó las manos a la boca tan asombrada.

Salió sigilosamente y tomó el ascensor, marcó el primer nivel, sus manos estaban heladas, se sentía extraña, jamás nunca esto habían hecho por ella, nadie había sido capaz de buscarla como lo hace Jin, pero ¿Por que lo hacía? Ahora más que nunca tenia miedo, pero también quería verlo...

Llegó al primer piso y salió, había un poco de corriente de aire, por lo que su piel se erizo ya que había olvidado salir con algo que la cubriera del frío, pero ahí estaba en la entrada y él frente a su auto.

—No te imaginas las ganas que tenía de verte Larissa -Seokjin sonrío acercándose a ella.

—Jin... yo... -se paro frente a ella y la miró a los ojos, se sintió nerviosa y no pudo hablar.

—Tú... te ves hermosa en pijama -sonrío y las mejillas de Larissa tomaron un rojo muy tierno.

—No es verdad, no debiste de verme así -se giró apenada y Seokjin posó su mano en su hombro.

—Larissa, mírame -pidió, él odiaba qué ella se hiciera menos.

—No Jin, será mejor que te vayas -dicho esto Jin la giró de los hombros lentamente y tomó su rostro entre sus manos.

—No quiero irme, no sin ti -dijo acercándose aún más a ella.

—Jin... -posó su indice en los labios de la joven y se acercó aún más, estrchandola entre sus brazos y acercando sus labios a los ajenos.

—Muero por hacer esto -unió sus labios con los de la joven, al principio ella no lo seguía y trato de separarse pero él logró evitarlo, sus labios comenzaron una danza con una sincronía perfecta, cómo si estuvieran hechos para el otro, fue magia para ella, para Jin un deseo... o al menos eso se hacía creer...

—Esto... -dijo confundida al haberse separado por falta de aire.

—Fue magnífico -concluyó quién la miraba.

—No, esto no puede ser -intentó huir de ahí, pero Jin logró detenerla.

—Larissa... no digas nada... vivamoslo, veamos que pasa -pidió el hombre de ojos rasgados.

—No, no podemos ni debemos... esto es un error -Larissa dió un paso atrás.

—No lo es, te juro que no vas a arrepentirte... Larissa, me gustas -suspiró y ella lo miró sin saber que decir.

—¿Cómo? No puede gustarte nadie en una semana, Dios -atacó.

—Creía lo mismo, hasta que llegaste tú... -no esperaba decir eso, pero salió de lo más profundo de su ser.

—¿Yo? -río.

—Si, tú... Larissa, tu me haces sentir vivo, me haces sentir cosas que jamás había sentido antes... Vaya, ahora me siento como un tonto adolescente hablando de amor -se giró.

—Seokjin, yo... -fue interrumpida.

—Sabes que, olvidalo, me largo -rodeó su auto, subió a el y arrancó llendose del edificio, dejando a Larissa con un signo de interrogación más grande que el Everest.

Hola, aparecí

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Hola, aparecí.
No es muy largo, pero es un capitulo muy significativo, no se esperaban eso eh, ¿qué esperan más de la historia? 🥺

Dejen sus comentarios, espero les guste.

__Jinismymoon🌠💜

WILDEST DREAMS; SEOKJINWhere stories live. Discover now