Cielo Sin Estrellas [Isaac Lahey y tu]

Prólogo

Moriré de calor.

Tú elegiste aquí.

Sí, me había ido de Beacon Hills por algunos días. Conclusión: había dejado a papá, Stiles y Scott solos. Aún no se como no han muerto.

Tal vez ya lo hayan hecho.

Negué lentamente. Tenía que disfrutar este último día que me quedaba en México. Me iría por la noche y tengo pensado disfrutar el poco tiempo que me queda lejos de lo sobrenatural.

Podríamos quedarnos.

Podríamos, pero no queremos.

Habla por ti. México me encanta.

Bajé una de las pirámides de Chichén Itzá en el estado de Yucatán.

De lo que Stiles y papá se perdieron.

Por la noche tomé un vuelo a una ciudad cerca de Beacon Hills. De allí papá pasaría por mi.

Mi vuelo se vio interrumpido por varios pensamientos tristes.
Nosotros dejamos de ser adolescentes desde el momento en que Stiles y yo decidimos arrastrar a Scott a buscar ese cadáver.
Sin darnos cuenta dejamos de preocuparnos por cómo nos veíamos, con quién saldríamos, si seguiríamos siendo vírgenes, dejamos de ir a fiestas. Todo había cambiado. Ahora éramos adolescentes que protegían a este pueblo de lo sobrenatural, lo cual hasta hace unos meses yo solo creía que estaba dentro de los libros que leía, pero no. Era real.

Dos humanos: hermanos gemelos, con su mejor amigo hombre lobo, teniendo que proteger a las personas de Beacon Hills y teniendo que mentir para el mismo propósito.

Además de eso teníamos que soportar las constantes preguntas de —"¿Estas bien?"— —"Son adolescentes, disfruten de su vida"— 
Las personas no tenían ni la menor idea de lo que pasaba detrás de lo que sus ojos veían, pero que ellos no querían creer.

"La ignorancia del ser humano es lo que los terminará extinguiendo"...

Abrí la puerta de la patrulla de papá y me quedé mirando la casa... Desearía volver las cosas a como eran antes, sin problemas, sin responsabilidades con las que podríamos morir. A dónde aún éramos adolescentes, niños inmaduros, no adultos en el cuerpo de uno.

Papá tomó mi maleta y la arrastró hasta dentro.

Algo nuevo comienza y así como todo tiene su principio, también tiene su final... 

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