✦Cuadragésimo noveno✦

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Scarabia era un dormitorio realmente impresionante.

En menos de la mitad de una jornada todos y cada uno de los estudiantes habían sido reagrupados y asignados a una tarea para devolver el Loungue y todos los lugares que el overblot de Jamil había afectado a su antigua gloria. Cualquiera creería que debido a su familia adinerada y vida acomodada Kalim sería un chico incompetente que rechazaría cualquier tipo de trabajo duro... pero demostró todo los contrario.

-¡Bien, ahora que Jamil ha vuelto a la normalidad es tiempo de celebrar un gran banquete! -Había anunciado alegremente, recibiendo uno que otro reproche de su vice-prefecto pero contando con todo el apoyo de los chicos de Octavinelle y los propios miembros de su dormitorio.

Hicimos una ultima pero muy placentera marcha al Oasis esa tarde, siendo auxiliados por una buen número de camellos y elefantes. Estaba demasiado agotada como para sorprenderme o huir por lo que simplemente me deje arrastrar por la corriente de euforia que envolvía a todos.

-¡Vamos Koebi-chan~, ¿no quieres que te enseñe a nadar?! -Un entusiasmado Floyd tiraba juguetonamente de los dedos de mis pies para de alguna forma sacarme de la sombrilla que me había a negado abandonar luego de llegar al Oasis.

-Preferiría que no, gracias.

-¿Ni siquiera cinco minutitos~?

-¡Floyd tiene razón, asegúrate de comer hasta saciarte, cantar, bailar y nadar! ¡Olvidemos todas las cosas malas y disfrutemos del momento! -Ahora entendía a un poco más a Jamil... ¿De donde sacaban estos chicos tanta energía? -¡Vamos Jamil, bailemos!

-¡Es-estoy bien así!

A mi lado Jade se dejo caer dándole un par de sonrisas maliciosas a Azul.

-Son realmente buenos bailarines. -Había dicho casualmente, al igual que la mayoría luciendo un look veraniego acorde al clima. -Tal vez deberías pedirles que te den un par de clases, Azul.

-Por favor deja de bromear. -Su respuesta fue casi tan rápida como su sugerencia, noté por sus labios fruncidos que Jade había logrado su cometido al hincarlo así. -Sabes que es un desafío demasiado grande para un tritón.

-¡En ese caso yo bailare~! -Floyd finalmente encuentra algo más con lo que entretenerse además de mis pies, abandona su lugar en la arena y corre tras Kalim.

-Finalmente, un poco de paz y tranquilidad... -Suspiro, poniendo mis brazos tras mi cabeza con intenciones de tomar una siesta cuando...

-¿Hmm? ¿Soy yo o hay dos personas corriendo a través del desierto, yanno?

-Debes estar imaginando cosas. -Susurro, volteando mi cuerpo al área contraría a la que Grim señalaba. -No creo conocer a alguien tan estúpido que sea capaz de algo así...

-¡¿Hola Suga, Grim?!

-¡¿Es-están bien chicos?!

-¡¿Funna?! ¡¿Qué esos no son Ace y Deuce?!

-Parece que te equivocaste, Suga-san. -Jade esta más que complacido de ver mi expresión de desconcierto tras reconocer las voces de Ace y Deuce gritar desde la distancia.

-Que novedad... -Me incorporo, deshaciéndome de las gafas de sol que había tomado prestadas para ver al par de chicos recuperando el aliento frente a mí, mi sombrilla, y los invasores: Azul, Jade y Grim.

-Cómo... ¿Cómo es que hace tanto calor...? -Ace jadea, me sorprende verlo vestir el uniforme de NRC. No duda ni un segundo en deshacerse del saco y arrojarlo directo a mi cara. -¡Ni siquiera es verano!

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