Segunda parte de "Nada es Gratis". Tienes que leer primero la primera parte para entender está secuela.
los personajes no son de mi autoría. Pertenecen al juego "Genshin Impact".
Crédito de la portada a /Chalseu_D en Twitter.
La historia es +18, a...
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Tartaglia se enfrentó a Afanng en la tan anciada lucha y logro matarlo.
- ¡JA! ¿QUE PASO? ¡AHORA QUE NO SOY UN NIÑO NO PUDISTE DERROTARME! - Tartaglia comenzó a reír maquiavélicamente mientras salía del lago completamente empapado.
Extasiado y atorado por la batalla, se acostó en el suelo boca arriba de brazos abiertos, riéndose satisfactoriamente mientras cerraba los ojos.
Un momento después, empezó a escuchar pasos que se cercaban a él, pero como pudo identificar que eran los pasos de una persona que se acercaba sin intenciones de pelear, se quedó en la misma posición, acostado.
La persona misteriosa era efectivamente lo que todos sabemos, el que más deseábamos que se haga presente.
Aether.
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Aether se acercó a Tartaglia, mirándolo con desprecio desde arriba.
- Levantate, eres repugnante. - Le declaró el príncipe del abismo.
Obviamente, al estar consumido en la corrosión del abismo, Tartaglia no lo reconoció.
- ¿A quien llamas repugnante? - Tartaglia se levanto fastidiado a pesar de estar totalmente cansado, realmente su cuerpo no daba más.
- ¿Ves a otra persona repugnante aquí? - Respondió Aether fulminandolo con la mirada.
- Tsk. - Chisto Tartaglia del fastidio, y levantó rápidamente su puño en alto para darle un golpe en el rostro a Aether.
El hermano de Lumine es extremadamente más fuerte que él, tanto que no es ni comparable. Tartaglia no estaba a su alcance, Tartaglia no es rival para Aether.
Aether frenó el golpe del ex Fatui, y lo tomo de la muñeca con tanta fuerza que se la quebró en un segundo.
Ambos escucharon el ruido de los huesos crujir y romperse.
Tartaglia empezó a gritar del dolor mientras lo maldecia y se alejaba de él. Con su mano sana apretaba fuertemente su muñeca fracturada.
- ¿Cuál es tu propósito aquí? ¿Para que viniste? - Aether le pregunto muy severamente, obviamente sabía la respuesta.
