Aunque... Yo ya no esté

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18 de marzo
Ciudad Blüdhaven

Dick corría tras un ladrón, casi riéndose de la mala suerte que tenía el criminal, al robar justo frente a un policía. Cuando logró atraparlo y esposarlo, lo llevó hacia la comisaría, donde su jefe Patrick sonrió orgulloso.

—Otro gran día— contestó Dick a la pregunta silenciosa, mientras entregaba al ladrón a uno de sus compañeros para que lo llevaran a la celda. Con su sonrisa característica camino hacia su puesto y comenzó el papeleo.

—Te veo muy feliz— su jefe se acercó. El joven sonrió y sacó su celular para mostrar una foto de dos niños (adolescentes), y cada uno tenía su respectivo trofeo y diploma.

—Mis hermanos, ganaron el primer puesto en su feria de ciencias— su jefe conociendo el cariño que les tenía el mayor a sus hermanitos, solo pudo atinar a sonreír y dar un par de cumplidos, haciendo que el pecho del joven se hinchara de orgullo.

—Casi nunca hablas de tu familia— murmuró el jefe, y la sonrisa de Dick se tambaleo un poco. —Perdóname si fui indiscreto.

—No, señor sólo... La relación con mi tut-padre es algo complicada últimamente— carraspeó incómodo, entendiendo eso como una señal, el jefe asintió y dando un último cumplido a los hermanos, fue a su respectivo puesto. Dick se quedó en silencio y sonrió enternecido por la foto, donde sus hermanos parecían estar abrazándose, pero Dick los conocía tan bien, que sabía que se estaban pellizcando con tal fuerza como para que los ojos de los dos estuvieran vidriosos.

Miró un momento más la foto para luego apagar el celular y continuar con su trabajo. Tratando de ocupar su mente y no pensar en su malestar, esto funcionó los primeros minutos, pero su celular vibrando en su bolsillo se distrajo, tomó el aparato sin ver y contestó.

—Bueno, habla Dick Grayson— saludó, pero al reconocer la voz del otro lado, maldijo en silencio.

—Dick, qué alegría oírte hijo— el chico hizo un sonido con la boca, sin saber que responder sin hacer incómodo la llamada, Bruce al entender la obvia incomodidad del chico, suspiro.

—Dick, bueno... No sé si sabes que el 23 hay una conferencia y presentaré el proyecto en el que estaba trabajando— El chico frunció el ceño, esta conversación no iba a terminar bien. —...Me gustaría que vinieras— parpadeo sorprendido, al notar que se había perdido en sus pensamientos durante la conversación.

—Ese día trabajó...Bruce

—Lo sé, pero...si pudieras pedir un permiso o...

—Bruce, en casi tres años no me has llamado y ahora es solo para ver tu trabajo... ¿ves lo mal que está el asunto? — se apretó el puente de la nariz con molestia, —No puedo faltar a mi trabajo Bruce, no iré.

—Por favor Richard, entiendo que estés molesto, pero...

—Dije que no, no vuelvas a llamarme— colgó la llamada y soltó un bufido, notando la creciente ira en su corazón. —Debería ir a buscar algún criminal para desquitarme— susurró y decidió olvidarse de la llamada.

23 de marzo
Ciudad Blüdhaven

Dick había iniciado su día con normalidad, se levantó, desayuno, fue a la estación de policía, hizo papeleo y luego salió a patrullar. Detuvo un robo y ayudó a un niño a encontrar a sus padres. Todo normal, hasta que llegó a la estación alrededor de las 13:15.

Cuando llegó a la estación, noto que todos estaban viendo la televisión, con algo de curiosidad dirigió su vista hacia la pantalla, al leer el título sintió su sangre congelarse y sus manos temblar, su capitán se acercó despacio y colocó con pesar una mano en su hombro.

—Pedimos discreción a los espectadores, las imágenes que están por ver, pueden ser muy fuertes para ciertos públicos— Dick no pudo apartar la vista, mientras pasaban un video grabado por algún testigo, el video mostraba como Bruce parecía correr hacia sus hijos unos momentos antes de que el edificio les cayera encima, y el video se cortó.

Dick atinó a sentarse en la silla más cercana, sintiendo el sudor frío inundando su cuerpo y cómo su mente, repetía una y otra vez los últimos segundos del video. 

Ultimo capitulo que habla del pasado :D
ahora si viene lo triste

Editado el 15/03/2024